Un estudio recomienda no hacer ejercicio enfadado ni preocupado

Los investigadores del estudio de Heart Association examinaron dos factores desencadenantes comunes de infarto agudo de miocardio, o ataques al corazón: disparadores emocionales y el esfuerzo físico.

Para los especialistas del informe, el esfuerzo físico incluye cualquier tipo de actividad que acelere el corazón más allá de su frecuencia cardíaca en reposo habitual. Y en cuanto al aspecto emocional se incluyen factores de alto estrés, desde la muerte de un familiar o el hecho de perder el trabajo.

Aumento del riesgo

El estudio halló que en los casos examinados, ambas situaciones aumentaban el riesgo de sufrir ataques al corazón. La forma en que se hace ejercicio mientras estás enojado, afecta al estado de ánimo de una manera positiva, pero a un costo inesperado. El ejercicio motivado por la ira, en realidad podría poner la salud en riesgo cardíaco.

Los autores del estudio aseguran que el hecho de que estar enojado y hacer ejercicio pueda aumentar las posibilidades de un infarto, no implica abandonar el ejercicio físico. El ejercicio es sin duda una buena forma de liberar el estrés si se realiza de una manera segura y saludable.