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MONTAÑA

Fue el primer español clasificado la Salomon Citytrail del pasado domingo

Tòfol Castanyer: “El secreto está en la sobrasada mallorquina”

(30-4-2014). Es un corredor de montaña atípico. Le encanta el monte, pero no desdeña el asfalto y termina cada temporada con un maratón en carretera. A los casi 42 años, este campeón del mundo de carreras por montaña (2010) sigue dando mucha guerra. Aparte de la sobrasada mallorquina, su secreto es la filosofía con la que afronta la competición. Como buen mallorquín, Tòfol Castanyer se toma las cosas con calma y no se agobia demasiado. Es un competidor nato. Comprometido, siempre lucha hasta el final, como demostró en la pasada edición de la Cavalls del Vent. Terminó segundo, enarbolando una camiseta verde en defensa de la enseñanza pública en catalán en las escuelas mallorquinas. Su mujer y sus dos hijos (en un poco más de un mes será padre por tercera vez) son su carrera más importante. Una victoria segura. Ha empezado la temporada con unos resultados espectaculares. El pasado domingo quedó tercero en la Salomon Citytrail. Buque insignia del Team Salomon, su gran reto para este 2014 es el UTMB.

Acabas de terminar tercero en la primera prueba de citytrail en nuestro país, organizada por Salomon en Barcelona (9,8 kilómetros y 200 metros de desnivel). Has hecho un viaje exprés desde Mallorca. ¿Cuáles han sido tus sensaciones?

Me sentí como me esperaba. Es una prueba muy diferente a lo que ahora estoy entrenando o compitiendo. El fin de semana pasado hice el Trail de Mallorca con ritmos de 5 y algo por kilómetro y en la citytrail íbamos a menos de 3:30 min/km. Evidentemente, suponía que sería una carrera a ritmos agónicos porque ahora mismo no estoy acostumbrado a ir tan rápido. Fue intensa y muy rápida, pero también muy divertida. Subíamos y bajábamos escaleras, ahora un parque… fue muy divertido, sobre todo, en el marco incomparable de las fuentes de Montjuïc.

Correr per ciudad con el espíritu de la montaña. ¿Qué te parece la filosofía del citytrail?

Es difícil convencer a la gente de llevar la filosofía de la montaña a la ciudad. Correr por montaña o hacerlo en la ciudad, evidentemente, no tiene nada que ver. Pero hay muchos corredores que no pueden entrenar durante toda la semana en montaña y sólo pueden acceder al monte el fin de semana. En Europa hay mucha gente que lo hace. En Francia, de hecho, se hacen citytrails en muchas ciudades. Si yo viviera en Barcelona, seguramente iría a Collserola o a Montjuïc, subiría escaleras… No se intenta convencer a los corredores que con un citytrail están haciendo montaña. Pero para aquellos que no tienen la posibilidad de hacer montaña, es una forma diferente de entrenar.

De hecho, tú eres un trail runner atípico porque también corres por asfalto, donde te iniciaste. Si tuvieras que quedarte con una de estas dos superficies, asfalto o montaña, ¿cuál elegirías?

Sin duda alguna, montaña. Tiene un marco incomparable. De hecho, cuando hacía atletismo, ya corría mucho por la montaña en Sóller. Y eso que aún no existían las carreras por montaña. Me agobiaba mucho ir a la pista de atletismo. Siempre que podía me escapaba a entrenar al monte. Y ahora, después de correr 8-9 meses por montaña, me gusta terminar la temporada con un maratón de carretera. Te permite desconectar de subidas, bajadas, piedras… Muchas veces, los puristas de la montaña no entienden este hecho. Pero me gusta. Por qué? Pues porque vengo del atletismo, porque me apetece aún sentirme rápido encima del asfalto. Algo que quizás un purista de montaña tampoco puede entender. Debo ser un poco un bicho raro (reflexiona sonriente).

Corriste en Barcelona sólo una semana después de ganar el Trail del Ultra Serra de Tramuntana en tu tierra, 67 kms y 2.400 metros de desnivel. Es una carrera que se hace muy dura por el terreno mallorquín, lleno de piedras.

Es verdad que en Mallorca no tenemos mucha montaña, pero los 110 kilómetros de la Serra de Tramuntana sorprenden muchísimo. Es montaña baja, máximo subes a unos 1.300 metros, pero la tipología de terreno es muy dura. Muchas piedras, muchas rocas, no es un terreno cómodo para correr. Puede engañar a quien no lo conoce. Además, por ejemplo, hay muy pocos lugares en el mundo como el Barranc de Biniaraix (Sóller) donde tienes 4-5 kilómetros de escaleras de piedra subiendo. La gente, cuando viene, se sorprende mucho. Después de haber corrido el Ultra en 2013, mi corazón me decía que debía repetir. No lo hice porque en pocos días corro la Transvulcania y eran demasiados kilómetros. Pensé más con la cabeza que con el corazón. En 2013 disfruté muchísimo con el Ultra, corriendo por la noche, en mi tierra, fue un verdadero placer. Este año, corrí el Trail de forma intensa, como un entrenamiento de calidad, con muy buenas sensaciones y un muy buen tiempo.

¿Te gustaría que tu compañero de equipo Kilian Jornet participara algún año en esta prueba, corriendo en tu isla?

Si no me equivoco, Kilian nunca ha estado en Mallorca. Un día, en los Dolomitas, compartiendo habitación, me dijo que nunca había competido ni entrenado en la Serra de Tramuntana y que le apetecería hacerlo. Me encantaría que viniera. En primer lugar, para enseñarle mi isla, ca nostra (nuestra casa, en mallorquín), pero también porque donde va él siempre hay un seguimiento mediático asegurado. Sería una forma de dar a conocer más esta carrera y su entorno. Además, estoy convencido que le encantaría Mallorca y correr por nuestra montaña.

Estás a punto de cumplir 42 años. ¿Crees que el boom del Trail Running te ha pillado demasiado mayor?

Si te dijera que no, estaría mintiendo (y se ríe abiertamente). Está claro que no lo puedo cambiar y sólo puedo disfrutar al máximo del tiempo que aún me queda corriendo a un gran nivel. De hecho, estoy sorprendido del gran rendimiento que estoy teniendo. Tengo mucha suerte porque me encuentro muy bien. Además, afronto las competiciones de una forma diferente. A la Transvulcania, por ejemplo, sólo llego unas 12 horas antes de empezar la carrera, cuando la mayoría de corredores llegan días antes para aclimatarse. Pero esta es la forma que he tenido siempre de enfocar mi vida atlética, priorizando la familia y el trabajo. Quizá esta filosofía hace que no me presione tanto a mi mismo a la hora de conseguir nuevos retos. Intento entrenar lo mejor posible, y cuidándome cuanto más mejor… pero sin agobiarme. Si las cosas salen bien, fantástico, que no… no pasada nada. Todo lo que he hecho hasta ahora es mucho más de lo que podía imaginarme.

Sigues con el entrenador de siempre, Félix Moreno, pero desde hace cuatro años también trabajas con el preparador físico Dani Salas. ¿Cómo han cambiado tus entrenos y la concepción de los mismos?

Estoy muy agradecido a Félix. Es la persona que más me conoce en este mundo. De hecho, creo que le conocí antes que a mi mujer, y eso que llevamos un montón de años juntos (y vuelve a reírse). Sabe muy bien cómo funciona mi cuerpo y él siempre planifica mi temporada. Pero desde hace 4 años tuve la suerte de conocer a Dani y Félix ha aceptado muy bien que Dani entrara a forma parte de nuestro equipo como la persona que se encarga de todo el acondicionamiento físico. En invierno, trabajo con él dos días por semana, y en verano uno. De los 6 entrenos que hago, dos los lleva Dani directamente. Con la edad que tengo, que el cuerpo aguante los zapatazos que te da la montaña… tiene mucho que ver el trabajo específico que realizo con él. Hago una preparación física mucho más completa que hace diez años. El gimnasio y el trabajo de fuerza que puedas hacer te ayudan mucho en la montaña, es un complemento ideal para el rendimiento.

Y con estas premisas, el gran objetivo de la temporada es el Ultra Trail del Montblanc, día 29 de agosto (168 kilómetros y 9.600 metros de desnivel positivo).

Cuando presenté los objetivos de esta temporada, alguno me tomó por loco cuando dije que el UTMB es mi principal reto del año. Dentro de poco más de un mes, seré padre por tercera vez, veremos como influye todo ello en la preparación (y ríe). La combinación entre familia, niños, trabajo y entrenamiento no es fácil, pero me gusta coger nuevos retos e intentar prepararlos lo mejor posible. Pero sin obsesionarme demasiado. Me gusta mucho competir, y cuando participo en una carrera está claro que quiero rendir y hacerlo bien, pero no tengo como prioridad única la competición en sí misma. Quizás esta filosofía de entender la competición es uno de los secretos de que a los casi 42 años esté aún allí delante. 

Has ganado la Trilhos do Paleozoico (Portugal), el KM Vertical de Puig de Galatzó (Mallorca),  el Trail dels Fars (Menorca) y, como decíamos, el Trail de Mallorca hace pocos días. Has empezado con fuerza la temporada. Y el día 10 de mayo, Transvulcania.

Como te decía, el objetivo que tenemos marcados con Félix no es Transvulcania, aunque seguro que será una de las carreras con más nivel en las que competiré durante este año. Hay un montón de americanos, Kilian, Luis Alberto Hernando… Pero mi objetivo no es la Transvulcania, sino el UTMB. Siempre me habían dicho que es una carrera como Zegama pero en ultra y siempre había dicho que no podía ir porque son las ferias de Sóller (y se ríe). Pero hago un viaje exprés que me permite competir y llegar cuanto antes otra vez a Sóller y disfrutar de las ferias, que para mi son como mi fiesta nacional (y vuelve a sonreír). Intentaré molestar un poco por ahí delante, y sino hacer un entrenamiento de calidad para el UTMB. Tengo ganas de ver el ambiente espectacular que se vive allí.

Y después del UTMB, para cerrar casi la temporada, correrás otra vez el Ultra Pirineu (antigua Cavalls del Vent). El año pasado Luis Alberto Hernando te ganó por pocos minutos, aunque en los últimos 10 kilómetros le recortaste mucha distancia.  ¿Esperas poder sacarte la espina del año pasado en Bagà?

Me apetece mucho volver, no sólo por la edición emotiva del año pasado. En 2013 me di cuenta que podía rendir bien en ultras. Aunque llevo muchos años compitiendo, los ultras son para mí relativamente nuevos. En 2012, gané el CCC del Montblanc, pero después tuve que retirarme en Cavalls del Vent por hipotermia. También he corrido el Ultra de la Serra de Tramuntana, pero no tengo mucha experiencia en esta distancia. Y el año pasado me di cuenta que podía rendir en carreras de 100 kilómetros y, además, acabando muy fuerte. El ambiente en Bagà, tanto en la salida como en la llegada, es increíble y terminar con la camiseta verde (defendiendo una enseñanza pública en catalán en las escuelas de Mallorca)… son momentos que evocan grandes recuerdos. Me apetece mucho volver, aunque soy consciente que el esfuerzo en el UTMB limitará mi rendimiento.

Tienes un calendario extenso en este 2014, parecido al de 2013. Esperemos disfrutar aún muchos años más de Tòfol Castanyer. ¿El secreto es la sobrasada de Mallorca?

Quizás sí que la sobrasada ayuda (y se ríe abiertamente). Siempre digo que yo estoy en el equipo Salomon desde que vieron el tipo de sobrasada que tenemos en mi casa, ya que nosotros hacemos matanzas de cerdo. Se nota mucho si la sobrasada está hecha con un cerdo que ha comido lo que tocaba. Ahora hablando en serio, intento siempre estar lo mejor posible, cuidarme… pero el secreto es no agobiarse tanto. De los que estamos en cabeza haciendo ultras, estoy convencido que soy el que menos kilómetros hace. Llevo muchos años entrenando y quizá tengo más fondo. Pero estoy convencido que, en el caso de un ultra, no todo es cantidad de entrenamiento. No es necesario hacer 6 horas cada día para hacer ultras. Sólo lo puede aguantar Kilian, porque es un deportista único. En mi caso, no entreno tanto como los demás, pero sí entreno con más calidad, ya que tengo menos tiempo para entrenar. El secreto, además, son las ganas de estar allí y todo lo que me gusta la montaña.

Más información:

@tofolcastanyer

www.tofolcastanyer.com

 

 


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