Queman zapatillas New Balance en protesta contra Trump

Estados Unidos está viviendo unos momentos de crispación tras la elección de Donald Trump como nuevo presidente del país. En una situación así, cualquier gesto puede convertirse en un polvorín, como lo ha sido el mensaje que una periodista del Wall Street Journal ha publicado en su cuenta de Twitter haciendo parecer que New Balance felicitaba la elección del nuevo presidente.

Poco después de conocerse los resultados, uno de los dirigentes de la marca norteamericana escribía en su cuenta de Twitter la frase: “La Administración Obama nos hizo oídos sordos y, francamente, con el presidente electo Trump creemos que las cosas van a avanzar en la dirección correcta». Una afirmación que una periodista del Wall Street Journal relacionó en la misma red social con un apoyo explícito al candidato Donald Trump, cuando la marca asegura que se refería a la política del Partido Republicano de no aprobar el Tratado Trans Pacífico de Comercio e Inversiones (TTP). Un tratado que, de aprobarse, “liberaría los aranceles con los productos fabricados en Asia perjudicando así la fabricación en suelo estadounidense y por tanto afectándonos enormemente cómo única gran compañía de calzado que fabrica allí”, comentan desde la marca.

Y es que, New Balance, a diferencia de otras marcas estadounidenses ha apostado por la fabricación de sus zapatillas en territorio norteamericano, uno de los pilares del programa político de Donald Trump, que considera que esta medida puede volver a impulsar la economía del país.

Rechazo a las zapatillas New Balance

Sin embargo, la matización de palabras no consiguió apaciguar la indignación de miles de ciudadanos que, viendo el supuesto apoyo que New Balance daba a Trump, decidieron mostrar su malestar quemando zapatillas de la marca, tirándolas a la basura o devolviéndolas a las puertas de las tiendas que la enseña posee en Estados Unidos.

Unos gestos de protesta que han sido registrados y publicados en la red y que pronto se han convertido en un método de protesta más contra la elección de Trump como nuevo presidente de EEUU. Ello, a costa de la imagen de New Balance.