Victoria de Francesc Godoy en el Triatlón Internacional del Atlético San Sebastián

Miles de personas siguieron desde primera hora de la mañana esta competición en distancia olímpica que cierra el ciclo norteño de destacados triatlones (Bilbao, Ondarroa, Zarautz, Lekeitio y San Sebastián), celebrado bajo cielo encapotado aunque con temperatura agradable al variar de los 17 a los 20 grados, algo que agradecieron los más de 800 participantes.

Los primeros 1.500 metros a nado en la bahía donostiarra, partiendo y llegando a la playa de La Concha, se hicieron con restos de la bruma matinal. Jake Montgomery, de Australia, salió como favorito, pero Godoy terminó en 18:08 y le sacó 10 segundos de ventaja. Aitor Regillaga y Gorka Bizkarra, en su peor especialidad, salieron del agua alejados de los primeros pero confiando en la recuperación de posiciones, como sucedió.

Con alto porcentaje de humedad y tramos con el asfalto ligeramente mojado se hizo el recorrido ciclista por Añorga, Usurbil, Orio, subida al alto de Mendizorrotz y descenso del monte Igeldo para la transición a la carrera a pie y por ello al cambio de zapatillas. Buen papel de Iker Leonet sobre la bici -el único con un parcial por debajo de la hora y 7 minutos-, momento en el que Cesc Godoy reforzó su liderazgo con una segunda posición en este segmento.

El joven australiano Montgomery, flojo sobre la máquina, mejoró bastante en la prueba atlética por el paseo de la playa donostiarra, donde el guipuzcoano Jon Unanue apretó mucho para ser segundo tras Francesc Godoy, que mejoró en 7 minutos el crono hecho en 2011. Montgomery tercero y cuarto Ander Okamika, un triatleta en constante alza.

La lógica planeó en la categoría femenina con el previsto mano a mano entre australianas, un cerrado duelo aunque siempre fue líder Charlotte McShane que, por ejemplo, salió de la prueba de natación con un segundo de ventaja sobre Natalie Van Coevorden. La igualdad fue total al terminar el segmento ciclista y a ambas se les adjudicó un crono de 1.19:23. En cambio, McShane exhibió un frescor superior en el tramo final que le permitió descolgarse de su compatriota y resolver el triatlón con 1:23 de ventaja respecto a la ganadora del pasado año cuando se impuso a Natalia Raña, hermana del triatleta internacional Iván Raña.