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CICLISMO

Angels Fornés, cofundadora de Aestas, nos da algunas claves para disfrutar al máximo de esta experiencia

Camino de Santiago en bici, un reto más personal que deportivo

El Camino de Santiago en bicicleta reúne muchos ingredientes para convertirse en un plan excelente para las vacaciones de verano: deporte, contacto con la naturaleza, bellos paisajes, convivencia y una gastronomía exquisita, entre otros muchos alicientes. Angels Fornés, una de las propietarias de la empresa alicantina Aestas, incide en que esta experiencia se tiene que vivir “más como un reto personal que deportivo”.

 

Aestas organiza desde hace ocho años rutas en el Camino de Santiago tanto a pie como en bicicleta. Angels Fornés, una de las fundadoras de la empresa, recomienda a los que se decidan a hacer el recorrido, independientemente de las etapas en las que se lo planteen, que se lo tomen “más como un reto personal que deportivo”. Y es que, según destaca, “el Camino de Santiago es una experiencia diferente. No se puede estar tan pendiente del crono ni tomárnoslo como una competición. Se trata de disfrutar del conjunto del viaje, de conocer gente, de contemplar los paisajes, etc. No es hacer kilómetros por hacer”.

Recorrer el Camino en bicicleta es una opción para aquellos que disponen de menos días para llegar hasta Santiago. Según precisa Fornés, la mayoría de los ‘peregrinos’ optan por el denominado Camino francés, bien desde Roncesvalles (800 km) o, sobre todo, desde León (300 km). No obstante, la enseña ofrece también variantes como el Camino portugués, que enlaza Tui con la capital compostelana.  

León-Santiago

Aestas propone recorrer los 300 km entre León y Santiago en seis días de ruta, aunque la duración es variable porque la empresa diseña las etapas según la condición física del participante. Aestas se encarga de organizar el alojamiento en cada etapa, el alquiler de la bici si el cliente no quiere llevar la suya, entrega y recogida de la bici en los puntos de partida y llegada de la ruta y otros servicios como portaequipajes. Asimismo se facilita al cliente un listado de los puntos a los que se puede dirigir si necesita una reparación de la bici o incluso el cambio de la misma.

La ruta se organiza bajo demanda de grupos y se puede realizar con o sin el acompañamiento de un guía de la empresa. No obstante precisa que la mayoría son grupos reducidos y que suelen decantarse por ir sin por su cuenta, es decir, sin el acompañante de la empresa.

Por caminos y ‘avisando’

Fornés aconseja alejarse de la carretera y completar el recorrido del Camino por senderos. “Hay bajadas y subidas muy fuertes  -advierte- en las que recomiendo echarse la bicicleta al hombro o empujarla, pero nunca salirnos a la carretera. Los lugares más dificultosos son precisamente los que más merecen la pena. Son experiencias que se tienen que abordar con tiempo”.

Por otra parte, considera imprescindible que el ciclista lleve consigo un timbre o cualquier otro elemento con sonido para “pedir paso” a los numerosos caminantes que transitan el Camino.

 Más información: www.aestas.es


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