(21-2-2014). La compañía deportiva alemana espera que una serie de contratos de alto perfil detenga este año las drástica caída en las ventas, tras reportar en el último trimestre de 2013 de una merma del 13,2% en los ingresos, siendo esta cifra peor de lo estimado inicialmente.
Puma, cuyo 84% pertenece al grupo francés Kering, informó de unas ventas en el cuarto trimestre de 2013 por valor de 960 millones de dólares, lo que implica una caída del 4,7%, descartando efectos monetarios. Mientras que los analistas estimaban que las ventas alcanzarían los 983 millones de dólares.
Actualmente, Puma se ubica en un distante tercer lugar en la industria de la ropa deportiva, por detrás de Nike y Adidas.
El nuevo presidente ejecutivo Bjoern Gulden está intentando que la compañía vuelva a sus raíces deportivas con un plan que cambia el foco del ex CEO Jochen Zeitz puesto en la moda deportiva.
La marca alemana, que el mes pasado desbancó a Nike como proveedor de la indumentaria del equipo de futbol inglés Arsenal en la próxima temporada, dijo que espera unas ventas netas estables en 2014, y que la segunda mitad del año compense un déficit en los primeros seis meses.
Asimismo, Gulden avanzó que podría darse otro contrato con un gran club de fútbol, aunque aún no habría nada cerrado.
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