(21-3-2014). Una pequeña startup con sede en San Francisco se ha visto obligada a retirar más de un millón de sus pulseras inteligentes Fitbit Force porque al parecer causaban problemas de alergia a sus usuarios.
Esta decisión ha sido tomada por la empresa al recibir quejas de más de 9.900 usuarios que tras utilizar la pulsera han sufrido irritaciones en la piel.
Antes esta situación, la Comisión de Seguridad de Productos de Estados Unidos está ejerciendo presión ahora sobre Fitbit para que informe de la situación a todos los propietarios de una Force de manera directa, utilizando medios como sus redes sociales. Un representante de la startup ha asegurado que “en las próximas semanas mandarán un email a los usuarios”.
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