Manuel Merillas: “correr en pareja es lo mejor para que ésta funcione”

Es un corredor todoterreno. Y no porque corra por el monte. Manuel Merillas entiende la montaña como un todo, no como una especialización. Con 25 años, se acaba de proclamar campeón de España de carreras por montaña 2016. Lo ha hecho tras vencer el Maratón Alpino madrileño (casi 46 kilómetros de recorrido con 5.300 metros de desnivel acumulado) en 4:07:17. Una felicidad total, ya que su futura esposa, Azara García, ganó en categoría femenina.

Manuel Merillas, que fue cuarto en Zegama, no se vió con opciones de ganar el Maratón Alpino Madrileño, según reconoce, hasta el kilómetro 40: “En ese punto me vi con piernas y supe que podía vencer”. FOTO: JCD Fotografía

Este campeonato de España de carreras por Montaña en la vigésima edición del Maratón Alpino madrileño, ¿es el mayor logro de tu carrera?

No es una victoria más, ya que hay que tener en cuenta que es un campeonato de España. Nunca he tenido la idea de ponerme a correr y conseguir carreras o logros. Mi mayor logro siempre ha sido hacer el anillo de los Picos de Europa, tanto en verano como en invierno. A nivel mediático, seguramente lo más importante que he conseguido es el subcampeonato mundial de Sky Running, la pasada temporada. Cada carrera me la tomo en función de la importancia que yo le otorgo. Me gusta correr contra gente de gran nivel. Y lo que más me gustó de la carrera del pasado domingo es la gran pelea que llevamos a cabo entre todos. Me lo pasé genial. Y encima llegué primero y gané el campeonato de España.

Hablas de pelea. Sobre todo con Hassan Ait y Aritz Egea, que dominaron la prueba durante las 3 primeras horas. Pero el auténtico desbarajuste de la general se produjo en el largo descenso final.

Tanto Hassan como Aritz tienen su forma de correr. Ya sabía que saldrían a por todas, muy fuerte. Y por detrás también había un elenco de corredores muy importante, Alfredo Gil (ganador en las últimas 3 ediciones), Dani García, que terminó tercero con un carrerón, Pablo Villa, Jessed Hernández, David García Castán… y más nombres. Un grupo de unos 10 corredores con un gran nivel. Mi idea era empezar a tirar a partir del quilómetro 30, en la última subida, donde estaba el último tramo técnico y después encarar rápido la bajada. Guardé fuerzas para ese tramo, pero no las tenía todas conmigo, y esperaba que no se me hubieran ido mucho. Salió todo como yo esperaba, pero no tan fácil como yo quería.

En ningún momento me vi favorito en el Maratón Alpino madrileño

¿Te veías dentro del grupo de los favoritos en la línea de salida?

Tras mi buena actuación en Zegama (terminé cuarto), sabía que estaba en buena forma. Pero ambas carreras son muy diferentes. En la Zegama-Aizkorri hay mucha lluvia y barro, mientras que el Maratón Alpino madrileño es una carrera de mucho correr y de velocidad. Y, en mi caso, me falta ritmo, porque con la lesión no puedo meter cargas de volumen ni de calidad. Pero esperaba que saliera un día bueno, que no pasara nada extraño, como así fue. Pero en ningún momento me vi como favorito.

¿En qué momento de la carrera fuiste consciente que tenías el título al alcance de la mano?

Hasta que no llegué a Navacerrada, en el quilómetro 40, no me lo creía. En ese punto me vi con piernas y supe que podía vencer.

¿Es más importante bajar bien que mantener el ritmo subiendo?

Todo. En las carreras por montaña cuenta todo. Hay que ser bueno en todo, muy equilibrado, pero destacar mucho en algún aspecto. Pero te diría que lo más importante es salir a un ritmo y llegar al mismo ritmo. Y si puedes aumentarlo paulatinamente, pues incluso mejor. Y regular los ritmos a lo largo de la carrera, controlando.

La altura nunca me ha afectado, sino que me beneficia

Eres un gran conocedor de esta zona de la Sierra de Guadarrama y el Maratón Alpino madrileño es un clásico del calendario español. Tiene largos trechos por encima de los 2.000 metros de altitud, ¿lo notaste mucho en tu carrera?

Ahora mismo estoy viviendo en un municipio que está a 80 metros por encima del nivel del mar. Pero en la travesía de los Picos, con la que ya llevo 5 años, siempre me he encontrado bien en altura entre los 1.600 y los 2.400 metros. De hecho, mis primeros 20 años de vida los viví en Valseco, que está a más de 1.000 metros. La altura nunca me ha afectado. Al contrario, me beneficia, la llevo muy bien.

¿A partir de esta victoria, cómo se presenta el resto de la temporada?

Me hice un pequeño esguince en el pie que no tenía lesionado. No es nada importante, pero tendré que estar una semana parado, seguro. Me gustaría poder estar este próximo fin de semana en el Campeonato de España de Kilómetro Vertical en Fuente Dé, pero lo veo muy complicado. Después me caso (y sonríe), y tras la boda, la prueba de los Dolomitas (15-17 de julio) y después el Mundial, con la Buff Epic Trail (22-24 de julio).

Haces un poco de todo, carreras cortas, KV’s, ultras. ¿Te consideras un corredor versátil o simplemente te gusta probar las distintas distancias?

Nunca me he puesto ni un límite ni un listón. No entreno específicamente para nada. Y el secreto de que se me de todo bien es que no entreno sólo para un tipo de carrera. Hago lo que me cuadra y lo que me apetece. Hago caso de mi entrenador, Juan Carlos Llamas, pero otras muchas veces no lo hago (y se ríe). Se me da bien todo porque hago de todo y no me pongo límites.

Muchas veces hay que pensar más en los descansos que en el entrenamiento específico en sí mismo

Anteriormente, tuviste como entrenador al gran Jokin Lizeaga. ¿Qué enseñanzas te dio que puedas transmitir a los corredores populares que empiezan en esto del correr por montaña?

Saqué muy en claro que hay que entrenar con cabeza. Antes, entrenaba millones de horas y me mataba a hacerlo. Pero, muchas veces, hay que pensar más en los descansos que en el entrenamiento específico en sí mismo. Si te pasas de rosca, no vas a llegar al final de temporada. Hay que buscar la forma paulatinamente, sin picos de forma.

La verdad es que mi mujer hizo una carrera extraordinaria. Está más fuerte que el vinagre

Tu pareja y futura esposa, Azara García de los Salmones, también fue campeona de España en Cercedilla, con un tiempo de 4:44:51. ¿Un buen regalo de bodas anticipado, no?

(Antes de contestar, lanza una carcajada). Fue un fin de semana perfecto para nosotros y para la selección de Cantabria. Fuimos con un grupo de amigos y nos lo pasamos genial. La verdad es que Azara hizo una carrera extraordinaria. Un tiempazo. Está más fuerte que el vinagre. Ha mejorado mucho en lo que más fallaba, en las bajadas y en los tramos técnicos. Se ha convertido en una corredora muy completa.

Casi cada día, Azara y yo entrenamos juntos. Menos en las series, en las que cada uno va a su bola

Tanto que, de hecho, en lo que va año, Azara no ha dejado de copar los primeros puestos en aquellas carreras y trails en los que se ha presentado. ¿Podéis entrenar juntos?

Generalmente, entrenamos juntos casi cada día. Quizás, 5 de 7 días podemos salir a entrenar el uno con el otro. Siempre que podemos aprovechamos la oportunidad. Menos la series, en las que cada uno va a su bola.

¿Correr en pareja es el mejor estimulante para poder compartir una pasión como ésta y para que la pareja funcione?

Sin ninguna duda. Haces lo que más te gusta con la que persona a la que quieres a tu lado. Te lo pasas fenomenal. La convivencia en casa siempre hace que el uno se canse del otro. Hay que buscar nuevos espacios para compartir. Estamos siempre activos, sin momentos muertos para pensar.

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@ManuelMerillas

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