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Beneficios y consejos

Ejercicio físico para evitar la depresión post parto

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(22-3-2019). La depresión postparto es una enfermedad que ocurre en el puerperio. Con la práctica de ejercicio físico se liberan hormonas, como las endorfinas, y mejora la circulación, fortalece el corazón, los pulmones, y los huesos, y controla la presión sanguínea, el colesterol y el azúcar en la sangre. Mariela Villar, Directora de Embarazo Activo, nos da las claves.

Para adentrarnos en las emociones propias del post parto es necesario comenzar el análisis desde bastante antes de ese momento. El motivo es que se trata de un camino que se ha venido forjando y construyendo desde mucho tiempo antes del parto. Lo hace de modo complejo e interdependiente entre múltiples factores, explica la Directora de Embarazo Activo, Mariela Villar.

Mariela Villar, CEO de Embarazo Activo, en el centro.

“La forma en que se va construyendo el camino durante los meses de gestación es particular de cada mujer e irrepetible”, añade Villar.

Además, estará moldeado por distintas variables: la socialización de género; la historia personal y familiar; la disponibilidad o no de un adecuado acompañamiento y un entorno favorecedor orientado hacia la escucha de las necesidades y la empatía; la capacidad de afrontarla desarrollada; el momento vital en el que se produzca el embarazo, entre otros aspectos.

“A todo esto”, prosigue la especialista, “se suma la situación concreta del parto, de cómo haya transcurrido en la experiencia de cada mujer y el ajuste o no a las expectativas que ella tuviera del mismo. Darán como resultado el inicio de la experiencia de la maternidad y del puerperio, etapa caracterizada por una marcada revolución e intensidad emocional y por numerosos cambios que afectan de forma integral a la mujer que acaba de convertirse en madre”.

Qué es el puerperio

La definición estricta de puerperio se refiere a aquel periodo comprendido entre el final del parto y la normalización de los cambios fisiológicos producidos durante el embarazo, afirma Mariela Villar. En este sentido se calculan aproximadamente unos 40-45 días (conocidos como cuarentena) para que la mujer recupere aquellos aspectos principales de su estado físico y a su vez, reacomode su estado psicológico-emocional acorde a su nueva situación vital.

Sin embargo no es la única forma de definir ni de entender el puerperio. Esta etapa también se puede delimitar como una sucesión de transformaciones progresivas donde el cuerpo femenino se va recuperando de aquellos cambios sufridos en el embarazo y en el parto

Desde esta segunda perspectiva durante el puerperio se podrían distinguir las etapas:

  • Inmediato: las primeras 24 horas
  • Precoz o propiamente dicho: Desde el 2ºdía y durante los primeros 7-10 días.
  • Tardío: hasta alcanzar los 40-45 días (cuarentena)

Puerperio alejado o psicológico: Es aquella etapa que se abre una vez cumplida la cuarentena y que cada vez tiene mayor visibilidad tanto por parte de los/as profesionales como por las propias mujeres. En numerosísimos casos hay pleno reconocimiento de que la etapa puerperal aún no está concluida ni física ni psicológicamente transcurridos los 40 días desde el parto, pudiendo haber razones diversas que requieran de un proceso más lento y paulatino para su asimilación, ya sea vinculadas a la transformación física producida por la maternidad como en relación al nuevo rol y lo que éste implica.

La depresión post parto

La Directora de Embarazo Activo afirma que la depresión posparto corresponde a una enfermedad depresiva que ocurre en mujeres en un período específico, el puerperio. Se caracteriza por una tendencia al llanto fácil, irritabilidad, por la presencia de sentimientos de culpa y obsesivos-compulsivos, por un rechazo hacia el recién nacido o bien reticencia a asumir su cuidado, por pérdida de la lívido y, en los casos graves, por la presencia de ideación suicida. Se puede detectar a partir de la cuarta semana posterior al alumbramiento, presentándose las mayores tasas de sintomatología depresiva alrededor de la semana 12 posparto. Su prevalencia es tres veces más alta en los países emergentes que en los países desarrollados.

Los factores de riesgo que han sido descritos para la depresión posparto son variados: edades extremas de las puérperas, el embarazo no deseado, las dificultades conyugales, los problemas con los padres, el nivel socioeconómico, la paridad, la patología gineco-obstétrica de la mujer, el parto por cesárea, el uso de anestesia en el parto, enfermedad del recién nacido y problemas en la lactancia, entre otros.

El embarazo y el puerperio representan etapas en la vida de la mujer en que debe enfrentar eventos vitales importantes como los cambios físicos, de roles, etc. Se han realizado estudios en que se han objetivado los cambios experimentados por las mujeres en estas etapas, utilizando mediciones en su calidad de vida. Según la OMS, la calidad de vida es: “la percepción que un individuo tiene de su lugar en la existencia, en el contexto de la cultura y del sistema de valores en los que vive y en relación con sus objetivos, sus expectativas, sus normas, sus inquietudes”.

Se debe destacar que antes de la depresión post parto suele haber una tristeza post parto, que muchas veces es normal, pero a la que hay que estar atentos, ya que si perdura en el tiempo se convierte en la depresión post parto descrita.

Por medio de la actividad física se liberan hormonas, entre ellas las endorfinas, que son las hormonas del placer y por ello la actividad física en el post parto juega un rol importante, no solo por todos los cambios y mejoras físicas que se irán viendo, sino por el bienestar emocional que la reciente mamá podrá sentir.

¿Por qué es importante realizar actividad física en el posparto?

Mariela Villar asegura que, tras el nacimiento del bebé, la mujer necesita retomar gradualmente el ritmo de su vida cotidiana, aunque esta vez con una cuota mayor de responsabilidades, pero tratando de no descuidar ningún aspecto de su vida.

Una de las maneras por medio de las cuales podrá volver a sentirse plena, es la práctica regular de actividad física, que la ayudará a verse bien y le facilitará el control del peso corporal: perderá exceso de grasas, y aumentará la masa muscular, luciendo un cuerpo más delgado, bien formado y mejor definido.

Poco a poco, la mamá percibirá cómo se marcan las formas del cuerpo, conseguirá tonicidad en sus músculos, y la tonalidad de su piel cristalizará su estado saludable. También, ganará energía, fortaleza y flexibilidad, lo que le dará más seguridad.

Que comience y que continúe con la práctica de ejercicios, mejorará su circulación, fortalecerá, además, el corazón, los pulmones, y los huesos, a la vez que controlará su presión sanguínea, el colesterol y el azúcar en la sangre. Asimismo, la ayudará a sentirse más contenta y positiva y a disfrutar más de su bebé y de su pareja, ya que aliviará tensiones y se sentirá con mayor entusiasmo.

Cuánto más activa sea, más vital se sentirá. Por esta razón, se recomienda que comience a realizar, previa alta médica, cualquier modalidad de ejercicio aeróbico que decida, siempre y cuando, su trabajo sea controlado por un profesional especializado quien le indicará el tipo de actividad adecuada.

Ejercicios y trabajo

Es importante comenzar con el trabajo aeróbico a un ritmo suave para luego intensificarlo, en la medida de lo posible, y obtener finalmente los máximos beneficios para la salud. Será preciso que la mamá realice ejercicios que la ayuden a tonificar los músculos de los brazos, los hombros, las piernas, y los glúteos, con lo que logrará mejorar la figura y la postura, y también las tareas cotidianas se le harán más fáciles de sobrellevar.

Por otro lado, también querrá recuperar su vientre chato. Con dedicación y regularidad en la ejercitación, podrá lograrlo, aunque deberá tener en cuenta que como los músculos del cuerpo humano trabajan en pares, tendrá que fortalecer la espalda tanto como el abdomen si quiere tener la panza plana, mejorar la postura y evitar dolores en la zona lumbar.

Los músculos del suelo pelviano se encargan de sostener los órganos internos, y durante el embarazo se han debilitado. Para restituirles su fortaleza, es importante que la mamá los ejercite, realizando ejercicios hipopresivos. De esta manera, evitará el riesgo de padecer incontinencia urinaria y mejorará también sus relaciones sexuales.

Paulatinamente, comenzará a sentir los beneficios de estar activa y en forma, como mamá y como mujer.

Consejos útiles para no olvidar

Por último Mariela Villar recomienda:

  • Para la práctica de cualquier actividad física utilizar ropa confortable, en lo posible de algodón.
  • Para realizar las caminatas usar zapatillas cómodas.
  • Dar el pecho antes al bebé.
  • Hidratarse antes, durante y después de la actividad.
  • Mantener un trabajo sistematizado y continuo para alcanzar los objetivos planteados.
  • Priorizar el trabajo postural, método 5p y ejercicios hipopresivos.

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