(18-11-2019). ¿Puede realmente la tecnología ayudar a fidelizar los clientes del gimnasio? El fundador y presidente de la empresa Telju Fitness, Juan José López Nombela, realiza una reflexión sobre la digitalización y los avances tecnológicos en el fitness, en este nuevo artículo de opinión.
La tecnología está en boca de todos y es protagonista de muchos artículos publicados en distintos medios, entre los que se encuentra CMDsport.
Artículos como el titulado ‘Digitalización en el gimnasio: mucha tecnología para poco uso‘, o la reflexión del consultor Chano Jiménez que indicaba que “los avances tecnológicos nublan la mente de muchos gestores”.
A ello se suma el artículo que he leído recientemente en el periódico digital El Plural que dice que “el exceso de tecnología afecta a la productividad y motivación de los trabajadores”. ¿Podría esto también afectar a los usuarios en sus entrenamientos en los gimnasios?
No es una poción mágica
La situación actual con la tecnología me empieza a recordar al ‘Bálsamo de Fierabras’ que utilizaba D. Quijote de la Mancha y que era una poción mágica capaz de curar las dolencias del cuerpo humano. ¿Vale la tecnología para todo, también para fidelizar a los usuarios?
Mientras no se trabaje profunda y profesionalmente en lo básico, difícilmente la tecnología podrá suplir a la gestión humana en cuanto a una correcta planificación de entrenamiento fuerza-cardio, que es lo que básicamente busca la gran mayoría de los clientes.
De hecho, no se dan de baja porque la tecnología les haya fallado sino muchas veces por el nulo seguimiento técnico-humano que se suele impartir. Tampoco será por el precio del ticket medio. A la vista está, si lo comparamos a los de hace 20 ó hasta 30 años, pues proporcionalmente hablando son mucho más bajos.
Los clientes no se dan de baja porque la tecnología les haya fallado sino muchas veces por el nulo seguimiento técnico-humano que se suele impartir
Exceso de tecnología
El exceso de tecnología que ofertan la mayoría de los equipos cardiovasculares y ahora también se está trasladando a los equipos de fuerza, han desvirtuado totalmente el propósito básico de lo que se denomina una “buena sala”. De hecho, en Telju Fitness ofertamos conectividad mínima para nuestros equipos cardiovasculares siempre y cuando lo requiera el modelo de negocio, de lo contrario el retorno es nulo.
La tecnología no mejorará nuestra salud, tampoco nos facilitará la pérdida de peso, no mejorará nuestra belleza, términos todos estos que son por los que acude la gente a los gimnasios. Si los usuarios no consiguen los objetivos deseados dejan de acudir al mismo.
Si los usuarios pueden hablar por el móvil, si utilizan la tablet, si envían o reciben WhatsApp, si miran y escuchan las televisiones de los aparatos cardiovasculares que, por supuesto, tienen mucha tecnología, entonces no están entrenando como se debe.
Más transpiraciones de camisetas y menos tecnología
Volver a lo básico
Tecnología: ¿buena o mala? Depende de cómo la apliquemos. Tecnología sí, pero sin olvidar lo básico. Más transpiraciones de camisetas y menos tecnología.
No solo hay que buscar en lo nuevo, sino volver, en muchos casos a lo básico que es lo que está finalmente marcando las tendencias de nuestro sector, con la vuelta desde hace unos años a los ejercicios metabólicos y similares.
“El verdadero peligro no es que los ordenadores empiecen a pensar como los hombres, sino que los hombres empiecen a pensar como los ordenadores”, comentaba Sidney Harris dibujante, mejor conocido por sus dibujos animados sobre ciencia, matemáticas y tecnología, y con esta cita cierro esta reflexión.
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