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El Bonasport Club planta cara al Covid-19 manteniendo más del 90% de su masa social

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Apenas un 10% de los empleados del Bonasport Club Esportiu de Barcelona sigue todavía afectado por el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que la entidad instó a raíz del cierre de instalaciones decretado por el Gobierno central el 14 de marzo.

(16-9-2020). El Bonasport Club Esportiu de Barcelona ha logrado mantener la mayor parte de su masa social durante la pandemia gracias a su condición de club Premium y al perfil mayoritario de sus abonados, de un nivel económico alto.

Antes de la pandemia, el Bonasport Club tenía unos 2.000 socios. A día de hoy, apenas ha sufrido un 8,5% de bajas, lo que equivale a unos 170 abonados. Es un 6,35% menos de abonados que el total que tenía a la conclusión de agosto del año pasado. Ese porcentaje de pérdida de socios se sitúa muy por debajo de la media de pérdida que, en líneas generales,  ha sufrido el sector del fitness. Desde la entidad aseguran, asimismo, que ese índice podrían llegar, incluso, a reducirlo de aquí a final de año: “Estamos teniendo más altas ahora que en las mismas fechas del 2019”, pronostica Eduard Cabré, gerente del Bonasport Club.

El responsable del centro deportivo del barrio barcelonés de Sarrià-Sant Gervasi confía en que el Covid-19 solo tenga una incidencia significativa en los tres meses que tuvieron que cerrar por el confinamiento. “La facturación de los primeros ocho meses ha caído un 32% respecto a la del año anterior, pero si los meses que van de ahora a final de año son normales, la afectación podría bajar al 25% o 28%”, anota.

A nivel de ingresos, en los dos primeros meses en los que volvieron a cobrar cuotas, julio y agosto, el descenso respecto a los mismos meses del 2019 apenas fue del 5,83%.

Sin embargo, las pérdidas durante este período las han compensado, en parte, los ERTE que aplicaron y que aún tienen en marcha -en la actualidad quedan por volver 8 trabajadores sobre un total de 85-.

VENTAJAS DEL MODELO PREMIUM

Cumplidos los 34 años de trayectoria, el Club Bonasport celebra que su modelo Premium le haya servido como escudo ante la pandemia. “El perfil del cliente que tenemos, con un cierto nivel económico; la tipología de nuestras instalaciones, con muchos espacios al aire libre; y los servicios que ofrecimos durante el confinamiento, con clases a través de internet pero en directo, así como consejos de todo tipo, jugaron a nuestro favor”. apunta Cabré.

El Club Bonasport priorizó ofrecer el máximo de servicios que pudo en cada fase del desconfinamiento, aunque económicamente no fuesen rentables en ese momento, con el objetivo de ofrecer la mayor comodidad y opciones de regresar al centro entre sus abonados. “Los socios lo han agradecido”, reconoce el gerente de la entidad. Según Cabré, los esfuerzos hechos de marzo a junio, incluyendo todas las medidas para garantizar la seguridad en el centro, les han ayudado “mucho” a fidelizar a su masa social.

A día de hoy, están en el 80% de su afluencia habitual pese a operar con aforos reducidos. Tras reducir en un 40% su oferta de clases durante las dos primeras semanas de septiembre, de cara a la segunda quincena de este mes volverán a ofrecer el mismo número de sesiones que el año anterior, aunque con menor cantidad de personas.

CRECEN UN 46% EN LOS CAMPUS

El verano vivido en el Bonasport Club ha sido más intenso de lo esperado gracias al éxito de participación de los distintos campus que organizaron. Entre sus distintas modalidades, vendieron 543 semanas, un 46% más que en el verano de 2019. “Hay muchos clientes que envían a sus hijos al extranjero durante el verano, y este año no lo han hecho. Hemos llegado a nuestro tope”, confiesa Cabré.

ACUERDOS CON AGENCIAS DE FUTBOLISTAS

En julio pasado, el Bonasport Club estableció acuerdos con dos agencias de representación de futbolistas, MWM Football Lab y The Player Management. El centro barcelonés ofrece a estos jugadores un servicio premium con el objetivo de optimizar su rendimiento y recuperarse de lesiones a través de un trabajo multidisciplinar.

“Son futbolistas en etapas de formación y de Segunda B. La preparación que hacen en sus clubes es algo ajustada y necesitan un complemento adicional que les ofrecen nuestros entrenadores”, concluye el gerente del Bonasport Club.


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