Roc Roi traza un “plan de choque” ante la falta de reservas para esta primavera

El cofundador de Roc Roi, Carlos Rabaneda, trabaja con un primer escenario optimista, en el que se permitiría la movilidad entre comarcas “desde finales de abril o principios de mayo”, y un segundo más pesimista, en el que la primavera se daría por perdida y no se podría operar con normalidad hasta principios o mediados de junio. Tanto en un caso como en otro, el objetivo de la empresa es salvar la temporada de verano, que supone el grueso de facturación anual.

Ante la cancelación masiva de reservas, la compañía catalana está aplicando una política restrictiva de costes, si bien Rabaneda reivindica que “la estructura fija de la empresa no ha estado en ERTO en ningún momento, desde el inicio de la pandemia, y ahora intentaremos no enviar al paro a ningún trabajador”.

“Ahora mismo vemos más factible que se salve el verano que la primavera”, asegura el cofundador, quién cree que la vuelta al confinamiento comarcal era previsible desde hace días. Bajo su punto de vista, la administración catalana “intenta salvar los picos de facturación del sector turístico, pero claro, eso tiene su punto negativo y es que se producen altibajos en el uso y ocupación del sistema sanitario”.

Rabaneda se muestra comprensible con cualquier medida para preservar la salud pública, aunque señala que “la falta de movilidad está destrozando a la economía y ni siquiera tenemos una perspectiva clara sobre cómo saldremos de la pandemia”.

Más afectación en el Pirineo que en Vilanova i la Geltrú

Las restricciones de movilidad entre comarcas afectan de manera más aguda a los dos centros de actividad que Roc Roi tiene en el Pirineo catalán, situados en Llavorsí y en La Guingueta d’Àneu. En cambio, en la base náutica de Vilanova i la Geltrú existen más opciones para captar público del Garraf que quiera realizar actividades “personales” o grupos de escolares.

Precisamente, el gobierno catalán permite la movilidad entre comarcas para realizar actividades extra escolares, como el caso de las colonias, pero Rabaneda sostiene que la demanda en este segmento será mínima “porque ni los padres ni los colegios se van arriesgar a salir de su comarca en el actual contexto”.

Con todo, desde Roc Roi subrayan que cualquiera de sus actividades al aire libre se puede realizar con total seguridad y se muestran convencidos que una vez se supere la pandemia, se producirá un boom en la demanda.

Semana Santa irregular

Rabaneda explica que el comportamiento de las ventas en Semana Santa ha sido muy irregular. En la base de operaciones localizada en Grandvalira (Andorra), “se impidió la entrada de turistas franceses y no se permitió la llegada de catalanes hasta un día antes del inicio de las vacaciones, por lo que las reservas fueron bajas”. En el caso de Vilanova i la Geltrú, “notamos un cierto movimiento por el buen tiempo, si bien es justo el inicio de temporada”.

Por último, respecto a los dos centros en el Pirineo catalán, “sí que hubo un incremento significativo de visitantes, pero la proporción de turistas que contrataron actividades deportivas fue bajo”.

Un 35% menos de ingresos en la temporada invernal

Cerrada ya la temporada de invierno, Roc Roi ha sufrido una caída de sus ingresos del 35%. Rabaneda explica que la bajada no ha sido superior gracias a que Francia ha permitido, durante gran parte de la temporada, la llegada de turistas franceses a Andorra, que si bien no podían esquiar sí podían realizar otras actividades alrededor de las estaciones.

Las actividades más demandadas durante el invierno fueron las motocicletas de nieve, los trineos de perro y las raquetas de nieve, por ese orden.