Próximo relevo en la presidencia de la Adipav

Tras ser la primera mujer que accediera a la presidencia de la Adipav en 2013, Anna Pujol, onceava presidenta de la asociación y primera mujer en ostentar dicho cargo, ya es, asimismo, el tercer mandatario de la asociación que ha estado más tiempo como máximo responsable de la misma. Sus diez años de mandato sólo han sido superados por el primer presidente que tuvo la asociación, Carlos Pena Cardenal, que estuvo al frente durante 16 años (desde 1951 hasta 1967), y por Joan Comajuncosa que estuvo once años (desde 1989 hasta el 2000).

Anna Pujol ha confirmado a CMDsport su decision de no presentarse a la reelección, alegando que “dos legislaturas son tiempo suficiente y seguir sería excesivo. Ha llegado el momento de pasar el testigo”.

LA ‘DAMA DE HIERRO’

Sus diez años como presidenta de la asociación la han constatado como una mujer de carácter, responsable, tenaz, ordenada, rigurosa, y leal defensora de la misma.

DE ‘LA NENA’ A LEYENDA. Anna Pujol tenía 16 años cuando en 1972 se inició en el patín a vela, a raíz de que su padre les comprara a ella y a su hermano una embarcación. Muy pronto empezó a hacer regatas. Los ‘vacas sagradas’ de por aquel entonces la llamaban ‘la Nena’ y algunos lo hacían entre dientes porque a aquella única mujer que por aquel entonces navegaba en la clase les tocaba verle la popa más veces de las deseadas. Tras 51 años como patinista y una vitrina con centenares de premios, algunos muy relevantes (tres campeonatos de cataluña absolutos de primera categoría, entre otros), ha sido y es fuente de inspiración para patinistas junior y otras féminas que se inician en el patín. Aquella ‘Nena’ es hoy una leyenda… en activo.

A Anna Pujol la han llamado algunos la ‘Dama de Hierro’ en alusión a la firmeza con que ha mantenido sus convicciones ante quien hiciera falta. Y se haya estado de acuerdo con ella o no, lo indudable es que siempre ha evidenciado que prácticamente todas sus decisiones y actuaciones han estado dictadas por ese estricto sentido suyo de lo que consideraba mejor para la asociación y, según los conocimientos del patín a vela adquiridos tras sus 51 años como patinista, también para la clase en general. No en vano, en 2017, sentenciaba en una entrevista con CMDsport que “una Adipav fuerte hace más fuerte al patín a vela”. Sin duda, Pujol ha gobernado la Adipav y, como les sucede a los gobernantes que mandan de verdad, ha suscitado reacciones a favor y en contra.

‘La Jefa’, como la han llamado otros, ha trabajado durante diez años en su incansable objetivo de mejorar el legado que recibió y es incuestionable que dejará la presidencia con todos los papeles minuciosamente organizados y clasificados.

Que Anna Pujol pase el testigo de la presidencia tras diez años es algo que la honra. El buen mandatorio evita apoltronarse y sabe cuando debe marcharse.

EL LEGADO

Anna Pujol deja tras de sí la culminación de los setenta y dos años que este año cumple la Adipav desde que ésta se fundara en 1951. Y a la estela de sus diez años como presidenta, Pujol deja también una clase mucho mas viajera, gracias a las subvenciones de ayudas al transporte de embarcaciones; una clase más difundida en Andalucia (dos campeonatos de España y una Copa de España), en La Manga del Mar Menor (un campeonato de España y una copa de España más la de este año), en Formentera (un Campeonato de España); así como más divulgada en Belgica (dos copas de Europa mas la de este 2023); y con el desembarco en Alemania (la International Adipav de 2019)…

Pujol también deja tras de sí entregadas y determinantes implicaciones en la organización de numerosos grand slams de la clase, así como apoyos a iniciativas como la divulgación de las regatas a través de la aplicación digital Estela; también los clinics de tecnificación de patinistas junior; las asistencias de éstos a competiciones en Bélgica, Andalucia y Francia; la consolidación de las relaciones documentales con el Museo Marítimo de Barcelona; la recuperación, restauración y reimplantación del monumento al patín a vela que erigieron los abuelos (o bisabuelos ya) de la actual generación patinista; la ayuda a dinamizar la actividad patinista en los clubes el año de la pandemia a través de la Lliga Adipav; algunas actualizaciones del reglamento de la clase…

Sin duda, Anna Pujol, junto con los miembros de sus juntas directivas, ha velado mucho por el patín a vela y lo ha hecho volar mucho. Tanto que deja muy alto el listón a su sucesor o sucesora.

LOS RETOS DEL SUCESOR O SUCESORA

El futuro presidente o presidenta de la Adipav tiene trabajo por delante. Mucho. Sobretodo porque la clase patín a vela por sí misma ha evolucionado mucho a lo largo de los últimos diez años. Hoy es muchísimo más numerosa y, por tanto, más
poliédrica; también es más abierta y avanza a mayor velocidad; es más técnica, está más interconectada que nunca, y tiene el mayor potencial de su historia para reforzarse donde ya es vigorosa, así como para expandirse más allá de los núcleos patinistas hoy consolidados y, en definitiva, para seguir creciendo todavía mas. También deberá impulsar el resurgir del patín a vela junior, todavía aquejado por los efectos derivados de la pandemia. No en vano, sigue siendo la cantera de nuestra clase.

Y el nuevo presidente o presidenta deberá también impulsar definitivamente programas para generar formadores que ayuden a que los que descubren el patín se apasionen por él.

Y, asimismo, entre los desafíos del futuro presidente o presidenta, otro no menos relevante: conquistar la auténtica conexión entre la clase y su asociación. La Adipav será más fuerte todavía si los patinistas la sienten realmente como algo suyo y se sienten orgullosos de su adscripción a ella. Y si eso, finalmente, se logra con lo grande ya que es la clase, por supuesto que al patín a vela no lo frena nada ni nadie.

Gracias Anna por habernos hecho llegar, junto con tus juntas directivas, hasta este hoy con un futuro tan estimulante y prometedor.