Bikephilosophy: “El ‘buque’ ha seguido navegando en un año de tormenta perfecta”

El máximo responsable de la cadena Bikephilosophy, Javier García, reconoce que “no se van a poder cumplir los objetivos que nos habíamos marcado a principios de año, pero analizando la evolución y situación del mercado, con capear el temporal y repetir facturación, este año nos podemos dar por satisfechos”.

En realidad, según expone García, Bikephilosophy está vendiendo más bicicletas que en 2022: a estas alturas de año, la cadena ha superado las ventas de todo 2022 en número de unidades. “Si no fuera por los descuentos que es necesario aplicar, nuestros ingresos serían ya superiores a los de 2022”, asegura el CEO.

CAÍDA “ESTREPITOSA” DE LA RENTABILIDAD

García señala que “no basta con ofrecer un gran servicio por sí solo, también hay que competir en precio; el mercado te obliga a vender con márgenes muy bajos que en realidad no te llevan a ningún lado”. El directivo lamenta: “la rentabilidad ha caído este año estrepitosamente”.

En ese contexto, un recurso para “poder vender con algo más de margen”, según añade el directivo, es comprar las bicis que los proveedores ponen en oferta. El problema que ello conlleva, añade García, es que “a las bicis que ya habías comprado anteriormente más caras, no les sacas nada de margen o incluso hay que venderlas por debajo del coste”.

SOBRESTOCK PERSISTENTE

García apunta que “todavía hay muchas bicis por todas partes. Siguen saliendo ofertas de las marcas mientras que en los almacenes de las tiendas también quedan muchas bicicletas”.

Ante ello, Bikephilosophy ha programado poco de la nueva temporada 2023-2024: “si acaso, hemos preferido acceder a ofertas”, apunta el directivo. El detallista no espera una regularización del mercado antes de mediados de 2024, su previsión es que la convulsión se mantenga en los inicios del próximo año.

Invirtiendo para el futuro

“Este año no es de recoger, es más un año de siembra y de prepararse para el futuro”, manifiesta García”. El directivo recuerda que “el sector de la bicicleta siempre aguanta, hay altibajos con años mejores y peores, pero haciendo las cosas bien siempre sales adelante”.

García asegura que Bikephilosophy fortalece su apuesta, con nuevas inversiones para “seguir creciendo y mejorando”. Según explica, la cadena emprenderá una renovación de sus tres tiendas, ubicadas respectivamente en Marbella, Málaga y Vélez-Málaga, buscando una mejora y modernización de las instalaciones. Asimismo, la cadena se plantea la ampliación de dos de los establecimientos, incluyendo la posibilidad de algún traslado a una nueva ubicación más espaciosa.

BUEN RITMO DE VENTAS DEL ECOMMERCE

Asimismo, la enseña continúa reforzando la inversión en su página web, que protagoniza este año un destacado crecimiento: los ingresos obtenidos con la venta online en los primeros nuevos meses de 2023 fueron superiores a la facturación total de ese canal en 2022.

Según García, este año el ecommerce representa un 15% del volumen de negocio total.

Encarar con fuerza el fin de año

El directivo confía en un buen cierre de este año 2023. Según explica, el mes de octubre “empezó con fuerza, se estancó un poco durante los días de lluvia, como es normal, pero al salir de nuevo el sol retornó el movimiento, con buen tráfico de clientes”. Ahora, espera un mes de noviembre “potente”.

García explica que, antes de la pandemia, noviembre solía ser un mes muy tranquilo, mientras que, en cambio, en los dos últimos años las ventas han sido destacables. Ante ello, Bikephilosophy se dispone potenciar inmediatamente sus campañas de marketing: así, Halloween, el 31 de octubre, representará para la cadena el pistoletazo de salida hacia Black Friday, previsto para el 24 de noviembre.

Más allá, García espera que la inercia adquirida durante noviembre sirva para impulsar la actividad en diciembre. El directivo recuerda que en el último mes del año suele aumentar la venta de bicis para niños y de complementos, pero los ingresos no destacan especialmente por encima de otros meses.

Todavía más allá, García considera primordial que “los stocks de bicicletas se vayan regularizando, que se pueda volver a vender con márgenes en condiciones y retorne un sistema de trabajo con reposiciones, pidiendo bicis conforme hagan falta”. En definitiva, retornar a una normalidad pre-pandemia.