(3-2-2025). La reacción a la reciente decisión de la UE de ampliar las medidas antidumping y compensatorias contra las importaciones de bicicletas eléctricas procedentes de China no acaba de responder a las expectativas suscitadas. Por esta razón, la LEVA-EU llama la atención sobre las bicicletas eléctricas baratas y no autorizadas procedentes de China, así como sobre los complejos procesos de exención para los componentes de bicicletas eléctricas ‘made in China’.
Los derechos antidumping y compensatorios anunciados para los próximos cinco años varían entre el 9,9% para Giant Electric Vehicle y hasta el 70,1% para un grupo de empresas no cooperativas. “Las importaciones del resto de bicicletas eléctricas de China consisten principalmente en productos de muy bajo costo”, ha escrito la directora gerente de LEVA-EU, Annick Roetynck, en un comunicado. Recordar que la LEVA-EU es la única asociación comercial en Europa que trabaja exclusivamente para vehículos eléctricos ligeros, dando a sus miembros una voz en la defensa europea de los LEV. Annick Roetynck asegura que que esa falta de concreción sobre los productos de muy bajo coste constituye un motivo sólido para exigir una vigilancia del mercado considerablemente más estricta.”
Entrada de bicicletas eléctricas no autorizadas
“Estamos convencidos de que las medidas aplicadas ahora facilitan sutilmente la entrada de bicicletas eléctricas extremadamente baratas que no pueden cumplir con los reglamentos técnicos de la UE”, explica en su informe la directora gerente de LEVA-EU, Annick Roetynck.
En dicho informe, Roetynck señala, asimismo, que “durante el período que se examina, las bicicletas eléctricas chinas se importaron a un precio medio de 298 euros. Para comparar, las bicicletas eléctricas importadas de Vietnam promediaron 790 euros, mientras que las de Taiwán alcanzaron los 1393 euros. Nos preguntamos cómo las bicicletas eléctricas chinas con precios tan bajos pueden cumplir los estrictos requisitos de la UE, como el ensayo según la legislación de la UE, el mantenimiento de archivos técnicos, el etiquetado CE, el nombramiento de representantes autorizados y la organización de la recogida de baterías al final de su vida útil”.
La LEVA-EU destaca la proliferación de bicicletas eléctricas no autorizadas, en su mayoría modelos con asistencia al motor superior a 25 km/h.
En los últimos seis años, diversos medios de comunicación europeos hemos informado en numerosas ocasiones varias veces sobre la posible evasión de los derechos antidumping.
En noviembre de 2023, se sospechaba que algunas empresas belgas habían violado las normas antidumping al importar las bicicletas eléctricas desmontadas.
Por otro lado, el pasado verano, las autoridades italianas acusaron a la empresa Bottecchia Cicli de evadir más de 9,8 millones de euros en derechos de aduana.
POP-UP CICLISTAS
En los Países Bajos, la importación ilegal de bicicletas no autorizadas causó mucho revuelo y finalmente llevó a la incautación de decenas de miles de ‘fat bikes’ y no menos de 9 importadores fueron multados.
Estos casos no tuvieron en cuenta la importación ilegal a gran escala de ‘fat bikes’ en los Países Bajos. Tras ser ampliamente difundida su llegada al mercado a través de las redes sociales, estos modelos se distribuyeron a través de pop-ups (tiendas volátiles). Se calcula que al menos 100.000 bicicletas eléctricas ilegales llegaeron al mercado de esta manera.
CLASIFICACIÓN ERRONEA DE LAS EBIKES
En el informe de la LEVA-EU se augura que “esos problemas persistirán y se agudizarán en toda la UE, especialmente a raíz de la acción de las tiendas online”.
“A la complejidad se suma la posible elusión de las medidas comerciales. Se importan anualmente millones de vehículos del código SA 8711 60 90 90, lo que suscita preocupación por la clasificación incorrecta de las bicicletas eléctricas para evadir los derechos. No existen derechos sobre los productos de este código”, se añade en dicho informe de la LEVA-EU.
El problema añadido de los componentes
La LEVA-EU también subraya las grandes dificultades que siguen causando los derechos de dumping sobre componentes convencionales de bicicletas, los cuales también se utilizan para el montaje de bicicletas eléctricas.
Estos derechos están sujetos a complejos procesos de exención, y la capacidad de producción europea de componentes sigue siendo insuficiente para satisfacer la demanda.
En base a ello, desde la LEVA-EU opinan que “muchos ensambladores de la UE no tienen otra opción que comprar componentes en China. Mientras tanto, las autoridades aduaneras concentran desproporcionadamente sus esfuerzos en la inspección y con frecuencia adoptan una postura excesivamente agresiva contra los montadores de la UE. Este enfoque genera una incertidumbre jurídica significativa, lo que agrava aún más los desafíos de cumplimiento para las empresas”.
LLAMAMIENTO A LA ACCIÓN
La LEVA-EU insta por escrito a la Comisión de la UE “a reasignar recursos de las medidas de defensa comercial para implementar mecanismos robustos de vigilancia del mercado”.
Según añaden desde dicha asociación, “es esencial garantizar la aplicación efectiva de las normas técnicas para detener la afluencia al mercado de la UE de productos de baja calidad no autorizados. También abogamos firmemente por la eliminación de los derechos sobre los componentes de bicicletas para reducir los obstáculos a los montadores, fomentar el crecimiento y alentar la innovación en el sector europeo de las bicicletas eléctricas”.
La directora gerente de LEVA-EU, Annick Roetynck, concluye que “al abordar estos problemas críticos, la UE puede apoyar a una industria de bicicletas eléctricas próspera y competitiva, garantizando al mismo tiempo la seguridad y el cumplimiento de las normas para los consumidores”.
No hay comentarios
Añade el tuyo