Skins demanda a la UCI tras las revelaciones de dopaje de Armstrong

Skins,  patrocinador oficial vinculado al ciclismo desde hace 5 años, también ha demandado al presidente de la UCI, Pat Mcquaid, y al presidente honorario, Hein Verbruggen, por su gestión de la crisis, la cual Skins alega es la principal causa de la significativa pérdida de confianza del público en el mundo del ciclismo profesional y como consecuencia daña la reputación internacional de la empresa.

Cómo patrocinador y proveedor, Skins se preocupa “de la imagen opaca que ofrece el ciclismo, como resultado de años de trampas y dopaje que queda de manifiesto en el caso de Lance Armstrong y que ha dañado a una marca que está vinculada a varios equipos ciclistas que incluye al equipo americano de ciclismo, el equipo australiano y de Nueva Zelanda de ciclismo, Rabobank Cycling, Team Europcar, Team Lotto Belisol and Team NetApp”, señalan. Entre otras la marca ha sido proveedor oficial de prendas de alta tecnología del equipo Americano en los pasados JJ.OO de Londres.

El Presidente de Skins ha dicho: “El escándalo de Lance Armstrong ha manchado la reputación del ciclismo de una forma irreparable. Como patrocinador hay claros indicios que afectan a la imagen de nuestra marca y empresa, la cual se ha creado ligada al ciclismo, apoyando la creencia en ‘El auténtico espíritu de la competición’. Nuestra reputación y credibilidad puede haber quedado potencialmente dañada”.

“Cuando decidimos invertir en ciclismo y pasar a patrocinadores tomamos el compromiso de invertir en programas de I+D que se llevan a cabo en colaboración con equipos y ciclistas. Nos sentimos orgullosos de nuestras asociaciones pero nos vemos involucrados con un deporte que manda poco o no genera confianza o respeto del público en general. Creemos que hasta que fue obligada por los irrefutables informes de la USADA, la UCI negó los hechos o falló al actuar para salvar la credibilidad del ciclismo y sus patrocinadores”, ha añadido.

Skins ha ordenado desde su oficina central en Lausana a la firma internacional Bonnard Lawson que se encargue de la demanda contra la UCI, McQuaid y Verbruggen.