(26-9-2024). Tras cinco años consecutivos de ir registrando anualmente récords de facturación, la filial española de Trek Bicycle sufrió el pasado 2024 su primer retroceso. Éste le supuso, asimismo, entrar por primera vez en números rojos después de que desde 2019 superara anualmente el millón de euros de beneficios netos.
Trek Bicycle no logró evitar las dificultades vividas por el mercado ciclista español el pasado 2023. Pese a que la empresa que lidera Olivier Pelous desde enero de 2009 había venido registrando desde entonces facturaciones ascendentes y récord año tras año, el pasado 2023, la compañía registró su primer ejercicio de regresión en sus ingresos. Según consta en el registro mercantil, la firma facturó 43,59 millones de euros, una cifra que estuvo un 20% por debajo de los 57,32 millones de euros registrados en el año 2022, año en el que la filial española de Trek Bicycle superó por primera vez los 50 millones de euros de facturación protagonizando su máximo histórico.
Los 43,59 millones de euros del pasado 2023 supusieron situarse por encima de las cifras prepandemia, pero a un nivel similar a los 43,15 millones de euros facturados en el año 2021.
PRIMER AÑO DE PÉRDIDAS
Trek Bicycle, S.L. ya llevaba viviendo un retroceso de su cifra de beneficios netos desde 2021, después de que en el pandémico 2020 obtuviera los de mayor calibre (2,29 millones). Pese a ello, tanto en 2021 como en 2022 éstos superaron el millón de euros.
Sin embargo, a la conclusión del pasado 2023, la compañía no sólo no situó sus niveles de beneficios tras impuestos en aquellas magnitudes sino, que entró en pérdidas, algo que no había registrado anteriormente.
Las pérdidas del pasado 2023 ascendieron, según el registro mercantil, a 1,27 millones de euros. El año anterior (2022), obtuvo unos beneficios netos de 1,55 millones de euros.
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