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Ante la acuciante falta de stock de este tipo de producto

Adrenalina renuncia a la venta de componentes para preservar el servicio del taller

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"DESBARAJUSTE TREMENDO". El propietario de las dos tiendas de Adrenalina, Diego Tamé, considera que el sector ciclista vive "un desbarajuste tremendo".

(18-3-2021). Muchas tiendas han renunciado a la venta de recambios para bicicletas con el objetivo de preservar la rentabilidad del taller. Así lo asegura el propietario de la tienda aragonesa Adrenalina, Diego Tamé, quién asegura que la acuciante falta de stock en el segmento de material duro para montaje obliga a esta medida.

“El sector vive actualmente un desbarajuste tremendo por la falta de suministro”. Son palabras de Diego Tamé, que rige dos tiendas bajo el nombre de Adrenalina en Zaragoza y Utebo, con un total de casi mil metros cuadrados de exposición entre las dos y servicio de taller en cada una de ellas. El detallista se ha visto obligado, según detalla, a renunciar a la venta de material duro para montaje, como cadenas, cassettes, pastillas de freno, grupos, frenos hidráulicos o transmisiones, porque “necesitamos destinar esos materiales al taller para sobrevivir”.

Ante la acuciante falta de stock de bicicletas y de componentes, Tamé sostiene que no se puede arriesgar a vender el material al cliente final porque, entonces, se perderían los beneficios asociados al montaje en su taller. El propierario asegura, además, que la decisión tomada en sus dos tiendas se ha generalizado en el sector. “Hoy en día, una tienda es rentable con todas las líneas de negocio en marcha, si una de ellas o las dos fallan, es imposible sobrevivir”, manifiesta.

Para el detallista, existe un gran déficit de material duro para montaje porque pocos grandes operadores han acabado copando casi toda la cuota de mercado. Como ejemplo, Tamé se refiere al hecho de que Shimano abastece la práctica totalidad de los grupos de transmisión en bicicletas con precios inferiores a mil euros.

Ni mucho menos el propietario de Adrenalina quiere quitarle mérito a la marca japonesa, que “ha lanzado productos mejores y a precios inferiores”, pero sí alerta que la concentración del mercado en pocas manos es contraproducente en un momento de desabastecimiento global como el actual.

Para Tamé, si alguna marca piensa en ofrecer alternativas a Shimano es el momento de concretarlas “porque ahora ni la tienda ni el cliente final valoran tanto la marca como la disponibilidad y la funcionalidad de los componentes”.

Las tiendas hacen de distribuidoras

El desbarajuste en el sector al que hacía referencia el detallista también se concreta en el hecho de que “las tiendas estamos ejerciendo casi de distribuidoras de las marcas”. Según sostiene, con la pandemia las tiendas se han visto en la necesidad de comprar componentes a precio de mercado y completar así el montaje de las nuevas bicicletas.

“La mayoría de marcas internacionales no te envían la bicicleta hasta que no está completa pero otras nacionales sí que te permiten que completes tu el montaje si eres capaz de obtener el componente que falta”, explica Tamé. Se trata de una práctica que ya se efectuaba con anterioridad a la pandemia pero que ahora se ha agudizado.

El problema, sin embargo, es que los detallistas se están encontrando con medio año de espera para recibir ciertos componentes, lo que dificulta la entrega de las bicicletas al cliente final.

Marcas que ya presentan la gama de 2022

En tercer lugar, desde Adrenalina señalan que muchas marcas han decidido avanzar la presentación de su gama de 2022 ante la incapacidad para servir la de 2021. “En nuestro caso, ya hemos realizado una primera presentación con BMC y en breve lo haremos con Conor, con el objetivo que las nuevas bicicletas nos lleguen en verano”, explica Tamé, quién se muestra expectante por saber si el material realmente llegará.

El detallista opina que algunas enseñas prefieren lanzar ya la nueva gama porque como son conscientes que no podrán servir más producto de la de 2021, juegan a la baza de la novedad, incluso aunque los cambios entre un modelo y otro sean sólo de un color o un componente. “En realidad el cliente final no valora tanto si es de una gama o de otra, lo que quiere es tener su bicicleta”, afirma.

Tamé sería partidario de alargar la gama de bicicletas de 2021, como mínimo, hasta septiembre, con el objetivo de que las marcas pudieran servir más producto durante verano, el momento álgido de ventas.

Riesgo de vender menos

Las dos tiendas de Adrenalina crecieron en facturación en 2020, a pesar de los tres meses de confinamiento. Sin embargo, el detallista se muestra expectante ante un 2021 “incierto” porque “existe el riesgo de que vendamos menos por no disponer de producto”.

Por otro lado, Diego Tamé confía poder recuperar este año los servicios de masajista y nutricionista que ofrecía a los ciclistas en sus tiendas pero que tuvieron que suspenderse a causa de la pandemia.


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