Biobike entrega las primeras 60 ebikes a Domino’s Pizza

Según manifiesta el socio y fundador de Biobike, Alejo Bastos, en breve entregarán otras 15 ebikes más, como parte de un primer acuerdo cerrado por un total de 75 bicicletas. Tras ello, la previsión es continuar próximamente con una nueva remesa de 75 ebikes.

Biobike ha establecido ese acuerdo con el grupo Alsea, operador de restaurantes que, además de Domino’s Pizza, cuenta con marcas tan conocidas como Starbucks, Burger King,  Vips o Foster’s Hollywood, entre otras.

Las bicicletas ayudarán a prestar el servicio de Domino’s Pizza en Madrid, Barcelona, Bilbao, San Sebastián, Vitoria, Valencia, Sevilla y Málaga. Biobike se encarga del mantenimiento de las ebikes que operan en Madrid, mientras que diferentes talleres colaboradores harán lo propio en el resto de ciudades.

Modelo ‘BH Anton Street’ completamente  “tuneado”

El modelo de bicicleta elegido para la misión es la BH Atom Street. Bastos destaca que cada ebike ha sido completamente personalizada, tanto en lo relativo a imagen corporativa como en cuanto a medidas de seguridad, sistemas antirrobos o sujeciones específicas para los cajones de reparto. “Hemos tuneado bastante la bicicleta original hasta conseguir satisfacer las necesidades del cliente”, señala Bastos.

NUEVA LÍNEA DE NEGOCIO

El fundador de Biobike expone que, a lo largo de los años, han trabajado con diferentes empresas de reparto, pero nunca con una operación de tanto volumen. El directivo destaca que el acuerdo alcanzado con el grupo Alsea supone para Biobike el inicio de una nueva línea de negocio centrada en el suministro y mantenimiento de grandes flotas de bicicletas eléctricas.

Biobike se plantea que el objetivo inicial de que esta nueva división de negocio llegue a aportar hasta el 20% de los ingresos anuales de la empresa.

Caída de ingresos en 2022

Después de crecer un 30% el año 2021, cuando la facturación de Biobike se situó en 1,1 millones de euros, los ingresos en 2022 cayeron hasta situarse en torno a los 800.000 o 900.000 euros, según declara Bastos, quien advierte que los números definitivos de 2022 “aún no están completamente cerrados”.

El empresario apunta que “queda demostrado que el boom de la pandemia ya es agua de borrajas; fue un momento en el que se hizo mucha caja, pero sabíamos que esa demanda no era sostenible en el tiempo”.

“Niveles indecentes de stocks”

De cara al presente año 2023, Bastos manifiesta que “creo que vamos a crecer, porque vamos a vender el stock y la facturación va a ser superior a la de 2022, pero en términos de rentabilidad habrá que ver…”.

El minorista explica que “como todas las tiendas, tenemos un stock indecente que queremos eliminar de la manera más rentable posible”. Bastos añade que “hay que intentar aguantar la monumental guerra de precios que está habiendo y ver cómo se desarrolla 2023, porque estamos en un mercado muy volátil”.

Expectación ante la evolución de la demanda

El directivo señala que, de momento, el año 2023 ha empezado “mejor de lo esperado”, pero es necesaria una mayor reactivación ya que “la demanda todavía no se encuentra a niveles óptimos”.

La principal causa de ello sería, a juicio de Alejo Bastos, la falta de confianza del consumidor ante la situación económica. Pese a ello, el ejecutivo también advierte de que el precio de las ebikes ha aumentado considerablemente y se declara expectante ante la evolución de cómo pueda afectar a la demanda durante los próximos meses ese encarecimiento.