(28-3-2023). Ciclos Currá registró el pasado 2022 una cifra de ventas similar a la alcanzada el año anterior, el cual, con una facturación de 2,38 millones de euros, se erigió en el ejercicio récord de esta cadena murciana de tiendas de bicicletas. Su propietario, Alberto Sánchez, se muestra muy satisfecho del rendimiento de su megatienda, la más grande de la región de Murcia.
Para el co-propietario de Ciclos Currá, Alberto Sánchez, todo son ventajas en su mega store de 1.800 metros cuadrados, la más grande de la región de Murcia y una de las más grandes de España. Ciclos Currá, que cuenta con otro establecimiento de 300 metros cuadrados y un potente ecommerce, facturó en torno a unos 2,4 millones de euros, una cifra muy similar a la del ejercicio anterior, 2021, en el que facturó, según consta en el registro mercantil, 2,38 millones de euros. Aquella cifra fue la de mayor calibre que había registrado la enseña desde 2017.
La mega store de Ciclos Currá se encuentra ubicada en una parcela de 2.000 metros cuadrados, justo al lado de Espacio Mediterráneo, un centro comercial con gran tráfico de clientes en la línea de costa de Cartagena. El otro establecimiento de la cadena se halla en una zona céntrica de la misma ciudad.
Ambas tiendas trabajan al unísono, “hay compras que se cierran en la tienda pequeña y se recogen en la grande; y lo mismo a la inversa, hay quien ejecuta la compra en la tienda grande, pero sale montado en su bici desde la tienda pequeña porque le resulta más cómodo”, explica el minorista.
Todo positivo
Lo primero que destaca Sánchez sobre la mega store es “la facilidad de aparcamiento para el cliente”, ya que “pueden dejar el coche en la misma puerta de la tienda y bajar su bici si la traen al taller, cargar su compra o simplemente hacer la gestión que precisen sin perder tiempo en buscar aparcamiento”.
Además, el detallista valora muy positivamente las posibilidades que ofrece un gran espacio para exponer todo el producto, no solo bicicletas sino también ropa y complementos. Asimismo, queda lugar para “un gran taller, con abundante sitio donde colocar las bicicletas de los clientes y poder trabajar con amplitud”.
El surtido de Ciclos Currá cuenta con modelos de bicicletas de las marcas Giro, Megamo, Mondraker y Scott, entre otras.
Sánchez también agradece el espacio exterior, que dedican a la celebración de diferentes eventos, montando carpas según la ocasión. Allí llevan a cabo también acciones para reforzar la relación de comunidad con los clientes, en ocasiones con barbacoa incluida. “Todo cuenta para dar un buen servicio”, afirma el minorista.
Ningún inconveniente
Por contrapartida, el detallista asegura que “no encontramos ningún inconveniente” derivado de la gran estructura de la mega store. Sánchez expone que “alguien podría considerar que precisar de más personal es un problema, dado el coste económico que conlleva, pero no lo vemos así”.
Al respecto, el minorista señala que “se traga de gestionar bien el equipo, con una plantilla bien preparada y motivada”. Sánchez indica que “al final quien lleva la tienda, y quien transmite la imagen la imagen de la compañía es el personal que entra en contacto directo con el cliente, así que se trata de una inversión y no de un gasto”.
La empresa cuenta actualmente con un total de nueve empleados entre sus dos establecimientos, de ellos tres son mecánicos y dos se encargan de la división online.
La mitad de la facturación es online
Ciclos Currá obtiene sobre el 50% de su facturación mediante las ventas a través de su ecommerce, aunque Sánchez afirma que “no invertimos demasiado en publicidad en google u otras plataformas”. Las compras a la tienda online de la cadena se concentran en España, especialmente en Cataluña, Madrid y País Vasco, y también en algunas provincias de Andalucía.
Lo mismo que en las tiendas físicas, la demanda online de Ciclos Currá se está centrando principalmente en bicicletas eléctricas de montaña. Sánchez destaca también el crecimiento que muestra el gravel.
Respecto al perfil de cliente online, el minorista sostiene que se trata de “aficionados que, con tiempo para desplazarse a una tienda física, buscan la comodidad de hacer un pedido ágil, rápido, con confianza, para recibir finalmente la compra en su casa”.
Asimismo, el detallista destaca la importancia de que los productos sean puestos a la venta en el canal online “con un precio competitivo, que no necesariamente tiene que ser el más barato, pero sí debe ofrecer una buena relación servicio-precio”.
Flojo inicio de 2023
El detallista murciano reconoce que el año 2023 ha arrancado con poca demanda, mucho más flojo que los inicios del pasado año. Recuerda, no obstante, que 2022 empezó con un alto nivel de ventas empujado por la inercia arrastrada tras el bike-boom de la pandemia. Fue durante la segunda mitad del pasado año cuando las ventas iniciaron una línea descendente, también para Ciclos Currá, que se ha prolongado hasta hace pocas semanas.
Sánchez, como otros detallistas del sector, confirma que con la llegada del buen tiempo se está empezando a animar la dinámica de mercado, volviendo a los comportamientos habituales antes de la pandemia. Es decir, parón de ventas durante los meses fríos y despegue en la primavera. “La manera de vender durante la pandemia fue algo excepcional”, concluye el minorista.
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