(28-1-2020). Poco más de un año después de la entrada en vigor de las tasas antidumping a la importación de bicis eléctricas de China, el presidente de la Asociación Europea de Fabricantes de Bicicletas, Moreno Fioravanti, hace balance de los efectos de la medida.
A finales de 2018, la Comisión Europea ratificó la imposición de tasas antidumping a la importación de bicicletas eléctricas de China. La medida satisfacía así favorablemente la petición de la Asociación Europea de Fabricantes de Bicicletas (EBMA), que tildó de competencia desleal a las e-bikes traídas desde el país asiático porque se importaban masivamente y se vendían a precios muy bajos gracias a las subvenciones que las empresas del gigante asiático recibían de su gobierno.
El presidente de la patronal europea, Moreno Fioravanti, explica en esta entrevista la repercusión de esta medida un año después de su entrada en vigor en la Unión Europea.
¿Cómo se han beneficiado los fabricantes europeos de eléctricas de las medidas antidumping para las ebikes procedentes de China?
Se ha producido un gran incremento de la producción sostenible en la Unión Europea y una profunda caída de las exportaciones chinas de bicicletas de pedaleo asistido. Esto ha significado no sólo un aumento muy beneficioso de empleos cualificados, sino también de las inversiones y la innovación. La industria europea de bicicletas, ebikes y componentes ha invertido unos mil millones de euros en mejoras tecnológicas de la industria 4.0 y en aplicar las mejores innovaciones mundiales para dar un salto en la calidad y la seguridad del producto a favor de los consumidores europeos.
¿Cómo ha repercutido la medida a nivel de cifras de producción y empleo?
El intenso aumento de la producción europea sostenible de eléctricas y componentes gracias a la adopción de medidas antidumping y antisubsidio contra la competencia desleal de ebikes desde China ha significado la fabricación en Europa de entre 1,3 y 1,4 millones de ebikes más en 2019 frente a 2017, es decir, hemos pasado del millón de EPACs fabricadas en Europa en 2017 a los 2,3-2,4 millones de 2019, lo que supone más del doble. Por la fabricación de cada 1.000 ebikes anuales, se han generado entre cuatro y cinco trabajos sostenibles y de larga duración relacionados con la fabricación, especialmente de gente joven muy cualificada y jóvenes ingenieros electrónicos. Esto supone la creación de unos 5.000 nuevos puestos de trabajo directos al año.
El problema de la competencia desleal viene de los masivos subsidios ilegales que el Gobierno chino concede a los exportadores
La imposición de tasas antidumping, ¿ha supuesto realmente la relocalización de la producción a Europa o las compañías europeas han llevado la fabricación a otros países no europeos?
La mayoría de la producción se ha trasladado a la Unión Europea. Los costes de ensamblaje en la UE o en otros países europeos no son muy altos si se comparan con los precios de las ebikes. El problema de la competencia desleal viene de los masivos subsidios ilegales que el Gobierno chino concede a los exportadores, que puede alcanzar un porcentaje realmente alto del precio de exportación. Durante cinco años, desde EBMA realizamos un detallado trabajo para recopilar evidencias en este sentido y así lo constatamos.
Todos los países de la UE se han beneficiado de la relocalización de la producción de bicicletas de pedaleo asistido, también fabricantes españoles como orbea, BH Bikes o TNT-Megamo.
Los importadores europeos se han quejado de esta medida. ¿Han tenido algún acercamiento a ellos desde la asociación de fabricantes europeos?
La mayoría de importadores están hoy día produciendo en la UE o también en Taiwán o Vietnam. Siempre estamos disponibles para ayudar a los importadores a encontrar proveedores europeos.
¿Cómo afectan las medidas antidumping a las bicicletas musculares?
Existen tasas antidumping a la importación de bicicletas musculares desde el año 1993. La medida se renovó en agsoto de 2019, un año en el que, por tanto, ganamos la entrada en vigor de las tasas antidumping y antisubsidio contra la importación de ebikes chinas y la renovación de la medida para las bicis convencionales.
En su opinión, ¿cuál es la situación actual de la industria europea de la bicicleta y cómo pueden ayudar estas tasas antidumping?
Las medidas antidumping y antisubsidio están restableciendo el campo de juego contra la competencia desleal de las exportaciones subsidiadas desde China, lo que significa un alivio vital tanto para los fabricantes europeos como para todos los productores de fuera de la UE. Si no existiera esta tasa antidumping para China, no existiría la fabricación de bicicletas, ebikes y componentes en Vietman, Camboya, Taiwán, Tunez, Turquía o Serbia.
En los próximos cinco o seis años, podemos hacer crecer la producción en la UE hasta los 7 u 8 millones de EPACs
En la actualidad, damos empleo aen la UE a 110.000 trabajadores cualificados en un total de 900 pequeñas y medianas empresas capilarmente distribuidas en 24 de los 28 estados miembros. Estas empresas y sus trabajadores son nuestro mejor activo. De hecho, somos la industria de la bicicleta más innovadora del mundo.
Las bicicletas de pedaleo asistido se han desarrollado en la UE en los últimos 25 años por parte de nuestra industria. En los próximos cinco o seis años, podemos hacer crecer la producción en la UE hasta los 7 u 8 millones de EPACs, con un incremento del 50-60% en nuestros ‘empleos verdes’, desde los 110.000 hasta los 160.000 o 170.000, así como disponer de más pequeñas y medianas empresas de bicicletas, ebikes y componentes y desarrollar más tecnología e innovaciones punteras que pueden mejorar la seguridad y evitar accidentes.
La industria europea del ciclismo es y será la mejor opción de sostenibilidad para los consumidores europeos.
La fabricación en la UE significa una reducción radical de CO2 y de otras emisiones tóxicas letales
¿Cómo favorece al medio ambiente la producción local frente a las importaciones chinas?
La fabricación en la UE significa una reducción radical de CO2 y de otras emisiones letales muy peligrosas como dióxidos sulfúricos. Cada bicicleta convencional o eléctrica importada desde China causa de 91 a 123 kilos de peligrosas emisiones extra en comparación con la producción local. Esto significa que si toda la producción anual de bicis eléctricas (unos 20 millones de unidades al año) se importara desde China, habría un incremento de emisiones letales de unos dos millones de toneladas de CO2 y dióxidos sulfúricos.
En torno al 50% de estas emisiones de derivaría de la producción barata de hierro, aluminio, productos químicos y energía en China, donde todavía pueden utilizar carbón masivamente hasta 2050, mientras que otro 50% vendría por el escándalo de que los contenedores de los barcos de mercancías aún utilicen combustibles dañinos en lugar de combustibles más refinados como el Euro 5 o el euro 6. La mayor fuente de polución en la Unión Europea, después del calentamiento, son las emisiones de los barcos contenedores.
Lo que tienen que hacer no es prohibir la importación de China, sino bajar los s precios de las empresas europeas. Lo que quiere este señor es hacerse rico triplicando el precio de una bicicleta.
Todo lo que dice es mentira.
El antidumping en España no ha creado más que problemas a las empresas importadoras, justo cuando empezaba a crearse un tejido industrial y de distribución con esto.
Los únicos que ganan son los alemanes de Bosh que son los que han promovido, para obligar a usar sus motores (caros, delicados y cuando se acaba la garantía, kaput)
En antidumping en España crea paro. Y los funcionarios de aduanas (tienen más poder de coacción que preparación) paran toda importación en la que pone “bicicleta” porque ni saben de lo que va. Otro problema más para la empresa española.
No sabemos defender lo nuestro.
A ver si viene el Italiano este a montar una fábrica de ebikes en España. ¿a que no? ¡Sólo nos quieren para el sol y vino señores! – y a bajo precio.