Shimano Iberia relativiza los efectos del cierre de su factoría de Malasia

Las autoridades de Malasia han decidido parar gran parte de la economía ante la incidencia de la pandemia del Covid-19. En base a ello, desde el pasado 1 de junio, la fábrica de Shimano en Malasia operaba al 60% para adaptarse a los requerimientos del Gobierno, pero diez días después se decretó su cierre total. En principio, el actual cese de actividad estará vigente hasta el próximo 28 de junio.

En este escenario, el CEO de Shimano Iberia, Eduardo Roldán, ha declarado que “el cierre de la actividad productiva en Malasia tiene, por el momento, un efecto moderado sobre nuestras previsiones de fabricación de los productos de la división de ciclismo”. De hecho, el ejecutivo pone más el foco en los problemas en los puertos para embarcar mercancías debido a la saturación que sufren las navieras.

DIVISIÓN DE PESCA

Desde Shimano Iberia, además, señalan que el cierre de la producción en las próximas dos semanas afectará, principalmente, a la elaboración de productos relacionados con la pesca y no tanto a la cadena de suministro de ciclismo.

“Si el Gobierno de Malasia decide prolongar el cierre de fábricas en Malasia más allá del 28 de junio, entonces deberemos evaluar los efectos de esa medida y, por supuesto, informaremos debidamente de ello al mercado. Sin duda, estamos pendientes de si el cierre se prolonga más allá de la fecha indicada”, ha declarado Roldán.

El máximo responsable de Shimano en el mercado ibérico subraya que la empresa japonesa cuenta con numerosos centros de fabricación en Singapur, China, Japón o Eslovaquia, todos ellos a pleno rendimiento y sin afectaciones en su actividad derivadas de las restricciones que genera el coronovarius.

“La situación actual es transitoria y la misma no ha provocado variación alguna en los planes de Shimano de aumentar este año en un 50% la producción para satisfacer la creciente demanda que vive el mercado ciclista mundial”, ha concluido Roldán.