(20-5-2020). Los fabricantes de máquinas de fitness han vivido un confinamiento con ventas espectaculares de productos para homefitness. Los registros alcanzados, sin embargo, no han compensado la caída en ventas del segmento profesional. Pese a ello, enseñas como BH, Oss Fitness o Precor instan a los gimnasios a aprovechar ese auge del fitnes doméstico para integrarlo en sus servicios y monetizarlo en un escenario que presagian que será progresivamente híbrido.
Fabricantes de equipamientos de fitness alertan que el homefitness ha llegado para quedarse, y aconsejan a los gimnasios empezar a buscar fórmulas para retener a aquellos clientes que hayan adquirido bicicletas o cintas de correr para ejercitarse en sus respectivos domicilios.
“Habrá gente que, cuando vuelva la normalidad, va a seguir prefiriendo entrenar en su casa, aunque no va a descartar por completo ir al gimnasio, porque somos una sociedad que nos gusta socializar con otras personas. Lo compaginarán”, explica para CMDsport Rafael Rodríguez, director general de Oss Fitness. Una opinión que comparte el director general de Precor Iberia, Eduardo Burguete: “La gente será consciente que podrá practicar más ejercicio en casa que antes, pero la mayoría de los habituales de los gimnasios no dejará de asistir al gimnasio, porque no tiene nada que ver la forma de percibir y recibir el servicio”.
AUMENTOS ESPECTACULARES DE VENTAS DE HOMEFITNESS
Ambos distribuidores de máquinas de gimnasio y de equipamientos de salas de fitness han registrado incrementos expectaculares de ventas de maquinaria homefitness durante el confinamiento. En BH Fitness también lo han vivido. Desde BH Fitness, Oss Fitness y Precor, sin embargo, coinciden que las ventas a particulares “no compensan” la disminución vivida en las ventas a los clientes profesionales (estas últimas suponen alrededor del 70% del total epara BH Fitness), porque aunque hayan crecido durante la crisis por el Covid-19, según explica el director general de BH, Pablo Pérez de Lazárraga,“estaban en registros muy bajos”. Este directivo ve difícil pronosticar qué nuevos modelos de negocio habrá cuando se supere la pandemia, aunque asume que será importante “compatibilizar que la gente vaya al gimnasio y que siga ejercitándose en casa”. Tras ello, añade: “no son dos temas excluyentes, sino complementarios. Habrá que buscar una fórmula que permita combinar ambas cosas y ello puede ser muy exitoso”.
Sin embargo, según Eduaro Burguete, de Precor, estas fórmulas ya existen. Menciona casos como Peloton o Volava, y reconoce que son un negocio que irá al alza. “Ya estaban implantadas, y ahora se han acelerado: empresas digitales especialistas en ofrecer servicios de plataformas online para consumir de forma particular en casa. Estas compañías van a seguir y van a crecer. Además, aparecerán y crecerán plataformas online que convivirán conjuntamente con los clubes tradicionales”, anota. El director general de Precor Iberia puntualiza que crear este tipo de plataformas no está al alcance de todos los operadores, y asegura que la mayor parte de clientes se fijará únicamente en aquellas empresas que ofrezcan las mejores experiencias. “Son proyectos que requieren de inversiones a gran escala. Deben ser grandes multinacionales internacionales las que ofrezcan los servicios. Dudo que entren en esto los operadores clásicos del servicio del fitness, porque su esencia son los servicios presenciales”.
UN TRIMESTRE PERDIDO
Los fabricantes de fitness coinciden que el Covid-19 provocará, en el menos doloroso de los escenarios, haber perdido un trimestre entero. “Los grandes operadores van a ralentizar sus operaciones y los clubes pequeños, en función de la fase en la que estén, tendrán muy complicado salir. No creo que estén pensando en hacer inversiones”, lamenta Burguete.
El ámbito de alcance también resultará fundamental: “En BH Fitness vendemos en muchos lugares del mundo y no en todas partes ha afectado igual el coronavirus. En España o Italia ha sido un drama, pero en el norte de Europa apenas ha habido confinamiento. En algunos países eso puede afectar mucho a nivel de ventas, en otros no”, comenta Pérez de Lazárraga.
El director general de BH Fitness reconoce que las ventas a los gimnasios bajarán “seguro” y sostiene que el sector vivirá “un bache importante” que está muy ligado con la confianza de los clientes y las dudas acerca de cuándo podrán volver a los centros.
Según coinciden los tres fabricantes, ahora los gimnasios piensan más en adaptarse a las nuevas medidas higiénicas que puedan surgir en relación con el coronavirus que en hacer inversiones en equipamiento, las cuales han pasado a un segundo plano.
Estas circunstancias han afectado a estos suministradores, que han visto reducido su volumen de ventas al segmento profesional. No obstante, tras varias semanas llenas de dificultades, con la progresiva vuelta a la actividad de los gimnasios alguno de esos proveedores empieza a ver la luz al final del túnel. Rafael Rodríguez, de Oss Fitness, afirma que “seguimos recibiendo nuevas peticiones de presupuestos para nuevos proyectos por parte de los gimnasios. De hecho, esta semana nuestros instaladores ya están montando instalaciones que teníamos previstas para el mes de marzo”. En esta empresa andaluza no han podido visitar, como tenían previsto, las fábricas de Asia, donde pretendían conocer de primera mano las últimas novedades. Pese a todo, siguen trabajando para notificar a sus clientes todas estas novedades. “Todo se ha ralentizado, pero no ha desaparecido”, puntualiza Rodríguez.
NO PREVÉN GRANDES CAMBIOS EN LOS GIMNASIOS
Los tres proveedores coinciden en otro aspecto: las medidas que se tengan que aplicar por el Covid-19 serán temporales y no provocarán grandes alteraciones en la distribución de los gimnasios. “Los clientes piensan que las instalaciones serán iguales a antes de la pandemia”, corrobora Rafael Rodríguez. En Oss Fitness cerraron esta semana un acuerdo con una empresa proveedora de material sanitario para añadir a su cartera de productos elementos de desinfección a sus clientes. Aunque asumen que las decisiones variarán en función de las posibilidades de cada operador, no creen que haya grandes alteraciones. “Podría haber cambios en la forma de distribuir los espacios, por zonas quizás, pero no creo que pueda cambiar mucho el número de equipamiento o de número de unidades por metros cuadrados”, tranquiliza Burguete.
Los tres dirigentes se muestran abiertamente contrarios a la implementación de las mamparas. “Aquí parece que no habrá tanta normativa como en sitios como Taiwan o Hong Kong, donde también vendemos. Se aconsejarán medidas prudenciales”, comenta el responsable de BH Fitness.
Por su parte, Rafael Rodríguez sostiene que “ocurriría algo parecido a lo que pasó con el tabaco. A los pocos meses lo desbarataron. El cliente no puede percibir inseguridad en las instalaciones deportivas”.
“Tenemos que huir de esa imagen catastrofista. La clientela se incorporará de forma progresiva, primero un 40 o 50%, quizás a final de año un 70%. Será más un tema de distanciar el equipamiento, si se tienen los metros suficientes, o de inhabilitar algunos equipos para mantener la distancia física necesaria. Las mamparas no creo que sean la mejor opción, es mejor buscar alternativas”, sostiene Burguete.
Los tres fabricantes han concluido que el distanciamiento social y la limpieza son opciones más razonables y menos aparatosas. “Es preferible dedicar los recursos a otras cosas, porque en unos meses esas mamparas estarán en el trastero o en el almacén”, suscribe Rodríguez. Aunque no sean partidarios de recomendar las mamparas, la mayoría de estos fabricantes ya ofrecen estos productos a los clientes que se las están pidiendo.
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