(27-2-2023). Fluidra cerró el pasado ejercicio 2022 con unas ganancias de 159,9 millones de euros, lo que supone un descenso del 37% con respecto al ejercicio anterior, a pesar de mejorar sus ingresos un 9%.
Fluidra prevé que las ventas y la rentabilidad caigan este año después de que la subida de los tipos de interés y la menor demanda de piscinas en el último trimestre lastraran su negocio en 2022.
El beneficio neto cayó un 37% a 159,9 millones de euros el pasado año, mientras que el beneficio antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones (Ebitda) cayó un 6,8% a 512 millones de euros debido a “presiones inflacionistas”, según ha informado la compañía en un comunicado.
Normalización del sector
El mayor fabricante mundial de equipamiento para piscinas fue una de las empresas que mejor capeó los confinamientos pandémicos en 2020, al beneficiarse del interés de los clientes adinerados por comprar o renovar piscinas, pero rebajó sus perspectivas en octubre del pasado año y ahora espera una contracción del negocio por “la normalización del sector”.
Las ventas en 2022 crecieron un 9,2% en 2022, pero fueron un 13% inferiores en el último trimestre en comparación con el mismo periodo de 2021.
Fluidra prevé que sus ventas en 2023 caigan a entre 2.000 y 2.200 millones de euros y que el Ebitda descienda a entre 410 y 480 millones de euros.
“La demanda de nueva construcción residencial será más débil en 2023; mientras que para el segmento de ‘aftermarket’ se espera que sea más resiliente”, señaló.
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