Piden una ley que obligue a hacer ejercicio físico en el trabajo y la escuela

La Sociedad Española de Obesidad (SEEDO-ESO) acaba de celebrar su XV Congreso en Vigo y en él cerca de 500 expertos en la materia han analizado la pandemia de la obesidad que se vive en España.

Felipe Isidro, , Catedrático de Educación Física y Coordinador del Grupo de Estudio de ejercicio físico y obesidad de la SEEDO.

Una de las conclusiones más destacadas ha sido la preocupación por la obesidad infantil. Para combatirla los especialistas han puesto sobre la mesa la necesidad de que la población realice más ejercicio físico. Incluso abogando por una  legislación que obligue en las escuelas y lugares de trabajo a hacer un mínimo de ejercicio físico, ya que, sino será muy difícil combatir esta enfermedad.

Propuesta legislativa

El Coordinador del Grupo de Estudio de ejercicio físico y obesidad de la SEEDO, Felipe Isidro, nos explica las propuestas y conclusiones realizadas.

¿En qué consiste esa propuesta de legislación?

Estamos contactando con diferentes partidos políticos e instituciones de relevancia para darles a conocer la pandemia de obesidad y sedentarismo que tantas consecuencias nefastas tiene para la salud de las personas. También para pedir acciones concretas como, entre otras, que promuevan una legislación que obligue a impartir más horas de educación física en la escuela e integre también la posibilidad de realización de ejercicio físico en las empresas incluido en el horario laboral.

¿Cómo se podría aplicar en los colegios y centros de trabajo?

En centros educativos modificando el currículum y añadiendo más horas de Educación Física progresivamente, hasta llegar a la hora diaria. Hay que recordar que en España tenemos actualmente únicamente dos horas de Educación Física a la semana frente a otros países como Japón, donde tiene dos horas de Educación Física ¡al día!

En cuanto a las empresas, aplicando el concepto de dosis mínima eficaz, con una hora semanal incluida en el horario laboral, distribuida en tres días semanales a 20 minutos por día o a 12 minutos diarios durante cinco días.

¿Qué tipo de ejercicios podrían integrarse en la propuesta?

En la escuela deberían equilibrarse en el currículum las actividades netamente deportivas y las de acondicionamiento físico, con mayor proporción de éstas últimas, ya que la oferta extraescolar de actividades deportivas es muy superior.  

En las empresas los ejercicios serían básicamente de compensación neuromuscular, realizando ejercicios seguros y eficaces en aquellos grupos musculares más inhibidos debido a la postura específica de cada puesto laboral. Eso significaría, incluso para las propias empresas, menos bajas laborales y mayor eficacia por parte de trabajadores más saludables consiguiendo un retorno económico muy importante.

En ambos casos, el objetivo principal es inculcar el ejercicio físico como un hábito en la vida diaria de las personas con los grandes beneficios para la salud que ello supone.

¿Es necesario legislar para favorecer el ejercicio físico?

Absolutamente necesario ya que las acciones de información y buena voluntad llevadas a cabo hasta ahora son totalmente ineficaces.

Se puede comparar a la situación de tabaquismo y la alta prevalencia de enfermedades respiratorias como la EPOC que ha logrado reducirse sólo tras la legislación que afectó, entre otras cosas, a los lugares donde se puede fumar. Menos tabaco es igual a menos enfermedades. Más ejercicio físico es igual a menos enfermedades.

¿Hay experiencia en algún otro país?

Me consta que en países como en Suecia ya existe legislación al respecto con unos beneficios para la salud de su población que ya empiezan a constatarse.