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SF3 y UCDP preparan una movilización para el próximo mes de enero

Promueven una gran manifestación estatal en defensa de los gimnasios

Buscan implicar a instructores y abonados en defensa de los centros como servicio esencial

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Aunque en alguna zona de España, como Cataluña, ayer se reabrieran las puertas de los gimnasios, en otras áreas como Aragón o Castilla-León, los establecimientos siguen cerrados y en otras como Andalucía, tienen fijado su cierre diario a las 18 horas.

(24-11-2020). Algunas entidades del mundo del fitness hacen un llamamiento a todo el tejido sectorial para aunar fuerzas y unificar criterios a la hora de planificar iniciativas en defensa de las instalaciones deportivas. Buscan aliados en todo el sector: operadores, monitores y, también, abonados.

La Asociación Española de Funcional Fitness (SF3) y la Unión de Centros Deportivos Privados (UCDP) lograron congregar, el pasado 14 de noviembre, a varios miles de personas que salieron a las calles de 23 ciudades españolas a protestar ante los cierres que está viviendo el sector deportivo y a reivindicar que los centros deportivos deben ser considerados como una actividad esencial.

Animadas por los letrados Andrea Moreira y Juan José Rubiño, de Rubiño Abogados (que se ofrecen como nexo del tejido asociativo deportivo de España), distintas entidades celebraron ayer lunes, 23 de noviembre, una reunión para tratar de coordinar acciones conjuntas en defensa del sector. Entre sus planes figura el organizar una manifestación que se celebre simultáneamente en varias capitales de provincia y que cuente con la máxima representación de actores del sector del fitness posible.

MANO TENDIDA A LA FNEID

“Hemos hablado con la Federación Española de Actividades Dirigidas y Fitness (Feda), con FiveStars Fitness, para que en la manifestación también se impliquen los monitores de los centros. También tendemos la mano al resto de asociaciones, como FNEID, para tratar de unificar criterios”, expone Hermes García, presidente de la UCDP.

El reto que persiguen estas asociaciones, que aglutinan a decenas de centros de todo el país, es lograr movilizar al máximo número de personas posibles. “En un gimnasio de 1.000 socios hay un gestor, pero también varios monitores, que no podrían trabajar con los centros cerrados, y muchos abonados a los que también hay que apelar”, añade.

FALTA DE IDENTIFICACIÓN

La anterior convocatoria se hizo con apenas 10 días de antelación y estuvo limitada por unas restricciones de movilidad que, esperan, se flexibilicen de cara a enero. Desde la UCDP lamentan que “más del 80% de los centros deportivos no se sienten identificados con ninguna asociación”.

“Ahora tenemos que olvidarnos de la asociación a la que representamos. Somos el deporte y tenemos que sacar a la gente a la calle para que se nos vea y se nos escuche”, reivindica el empresario, que pide más unión en las acciones de las asociaciones.

PIDEN APOYO POLÍTICO

Además de una rebaja del IVA, estas asociaciones están trabajando con algunas administraciones provinciales como las de Granada y Cádiz para que den su apoyo y logren que el parlamento andaluz defienda al sector deportivo como servicio esencial. “Queremos que se haga esto en todas las comunidades autónomas para que llegue al Congreso, que es donde se puede aprobar”, anota García.

Aunque la UCDP se desmarcó en un manifiesto de cualquier ideología o partido político, esta asociación ya ha recibido el interés de algunas formaciones políticas para recoger su petición y trasladarla a distintas cámaras territoriales. Un movimiento con el que esperan arrastrar a más formaciones para hacer presión y terminar logrando una condición que permita blindar al deporte ante futuras situaciones parecidas a la actual pandemia.

INVIERNO DIFÍCIL

Formada el pasado mes de junio, la UCDP cuenta ya con 74 pequeños y medianos gimnasios asociados. Desde la asociación prevén un invierno difícil por las restricciones, los cierres y la proximidad de las fiestas navideñas, una combinación que creen que derivará en un importante número de bajas a los centros deportivos.

Éstos están teniendo que afrontar otra problemática vinculada al Covid-19: las cuarentenas. “Raro es el día en el que no nos escriba algún cliente diciendo que tendrá que permanecer aislado y que no podrá venir al gimnasio en dos semanas al haber estado en contacto con un positivo”, lamenta García.

Según el dirigente, aproximadamente el 50% de los usuarios que se encuentran en esa situación opta por volver con normalidad al centro deportivo una vez ha terminado el período de aislamiento, mientras que el 50% restante opta por pedir algún tipo de compensación al centro o, incluso, anunciar que se da de baja por miedo a los contagios hasta que la situación pandémica mejore.


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