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La cadena tiene tres de sus siete gimnasios cerrados

Sparta Sport Center aguanta el tipo con el 43% de gimnasios cerrados

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El gimnasio que Sparta Sport Center posee en Oviedo sigue cerrado, al igual que los centros que la cadena tiene en Soria y Logroño.

(5-2-2021). Tras sufrir en enero cierres en tres de sus siete centros, Sparta Sport Center teme que la reapertura de sus gimnasios coincida con una época poco idónea para los gimnasios, que tras perder la campaña de enero, afrontan con mucha incertidumbre y preocupación una primavera en la que asumen que habrá un goteo de bajas.

Sparta Sport Center sigue cautiva por unos cierres que empezaron en noviembre y que se repitieron en enero. La cadena tiene presencia en siete comunidades autónomas distintas, pero en tres de ellas tiene los gimnasios cerrados desde mediados del pasado mes. Sólo en cuatro ubicaciones (Pamplona, San Sebastián, Santander y Jaca) puede mantener abiertos, y con una actividad condicionada a diferentes restricciones, los pocos gimnasios que le dan algo de aire a la cadena.

El resto, en Logroño, Oviedo y Soria, han tenido que bajar la persiana debido a las restricciones políticas y no está previsto que puedan volver hasta, al menos, la mitad de este mes. Esto, siempre y cuando la pandemia remita en sus respectivos territorios. “El problema principal es que esta situación se está alargando demasiado”, lamenta el CEO de Sparta Sport Center, Óscar Vergara.

“UNA BATALLA PERDIDA”

Los pronósticos del máximo responsable de la cadena, en relación a cuándo cree que les permitirán reabrir los gimnasios, son más bien pesimistas. “Creo que la reapertura llegará mucho más tarde que a mediados de febrero”, expone. El empresario asume que, muy probablemente, la vuelta no llegará hasta el mes de marzo. Algo que, deja claro, no les permitirá salvar la campaña de enero.

“A principios de enero logramos estabilizarnos tras varias semanas con bajas. El problema es ver qué ocurre de aquí a septiembre”, relata Vergara. El dirigente ve muy poco factible que el grueso de altas que habitualmente se incorporan a los gimnasios durante los dos primeros meses del año puedan hacerlo durante la primavera.

“Si podemos abrir en marzo, habrá un pequeño volumen de usuarios que vuelvan, pero ya hemos perdido esta batalla. Lo que no se ha vendido ahora, no se venderá en los próximos meses. La tónica general de marzo y abril es de pérdida de socios, y si eso se repite, será un año durísimo”, advierte.

PROMOCIÓN EN ‘STAND BY’

Ante este probable escenario, en Sparta Sport Center han decidido paralizar el plan comercial que un año cualquiera habrían lanzado por estas fechas para captar nuevas altas. “Por mucho que quieras empujar, ahora el mercado no está escuchando lo que dices”, asume. Lo intentaron el pasado mes de septiembre, cuando impulsaron una campaña para potenciar las actividades dirigidas que no tuvo el retorno deseado. “Ahora hay que escuchar al mercado con más delicadeza que en otras ocasiones”, comenta.

LAS RESTRICCIONES HORARIAS, EL GRAN CALVARIO

Pese al fastidio que supone tener alguno de sus gimnasios cerrados, Vergara lo prefiere a poder abrir pero sufriendo determinadas serie de medidas restrictivas que supongan un gran problema para los centros: “En Logroño nos obligaron a cerrar durante una semana a las cinco de la tarde y eso estaba siendo un verdadero drama. Generó mucha molestia en los socios y provocó algunas devoluciones, fue un problema brutal”, reconoce.

A los pocos días, el Gobierno de La Rioja decidió endurecer aún más esta medida y decretar un cierre que, por ahora, está previsto que finalice el 23 de febrero. “Ya tenemos por mano el protocolo de cierre, que nos permite mandar a todo el personal a ERTE y paralizarlo todo. Supone menos problemático que poder abrir con esa restricción horaria, que hizo mucho daño”, añade Vergara.

SIN AYUDAS, PERO CON PEQUEÑOS BENEFICIOS

Sparta Sport Center es una de las muchas cadenas que siguen pidiendo a las autoridades políticas una serie de paquetes de ayudas extraordinarias para el sector del fitness. Pese a operar en siete comunidades distintas, el CEO de la enseña denuncia que desde el inicio de la pandemia sólo ha podido acceder a una ayuda para autónomos del Gobierno de Navarra. Y la recibió durante la primavera del 2020. Una ayuda insuficiente para aliviar la tesorería de la cadena.

La cadena no quiere revelar cifras de balance del ejercicio del pasado 2020, pero sí reconoce que, gracias al esfuerzo realizado en recortar gastos, pudo cerrar el 2020 con beneficios, aunque éstos fueron notablemente menores a los registrados en 2019.


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