(25-2-2022) La franquicia española de gestión deportiva, Sportmadness, se propone alcanzar un centenar de unidades operativas y rebasar los 4 millones de euros de facturación de cara a un año en el que esperan poder abrirse a nuevos mercados internacionales.
Diez años después de nacer, en 2012, como una empresa de eventos deportivos, Sportmadness arranca un año clave para el que espera triplicar su red de franquicias. La empresa española, que actualmente cuenta con una treintena de franquiciados (la mayoría en España, pero también dos en México, uno en Bolivia y otro en Luxemburgo), se prepara para el que puede ser el año más expansivo de su historia.
“Tenemos un objetivo, muy ambicioso, de cerrar este 2022 con 100 franquicias. Es la meta a la que queremos llegar, aunque dependerá mucho de la aceptación que tenga en los mercados y de lo capaces que seamos de llegar a buenos perfiles con los que desarrollar proyectos”, explica a CMDsport el jefe de operaciones de Sportmadness, Guillermo Vázquez.
Los primeros cinco años de andadura, la empresa empezó realizando eventos, gestionando instalaciones deportivas, actividades deportivas con escuelas o proyectos con ayuntamientos de la zona noroeste de Madrid. A partir de 2017, la empresa reposicionó su modelo de negocio, lanzando su actual modelo de franquicias. Justo antes del estallido de la pandemia, en 2020, tenían una veintena. Ahora, dos años más tarde, aspiran a quintuplicar esa cifra. El covid frenó en un principio las altas, pero en los últimos meses han detectado un repunte de interesados.
El global de la red de Sportmadness superó los dos millones de euros de facturación el año pasado, doblando la cifra girada en 2020 (unos 1,1 millones) y cerca de hacer lo propio con la de 2019 (1,3). De cara a este 2022, aspiran a superar los 4 millones de euros, lo cual supondría volver a doblar su facturación.
ADAPTACIÓN A CADA MERCADO
La unidad central de la empresa, que ya cuenta con una docena de empleados, se ha reforzado en los últimos meses con personal para trabajar algunos de los mercados estratégicos en los que esperan poder posicionarse a lo largo de este año: Latinoamérica y Europa. Concretamente, mercados como México, Portugal e Italia.
Gracias a su posicionamiento online también han recibido interesados en expandir su marca a Alemania y Francia. “Buscamos buenos perfiles, de calidad, que luego nos ayuden a crecer en esos territorios”, aporta.
La intención de la compañía es que, de esos 100 emprendedores que esperan alcanzar a finales de año en su red, unos 60 sean de países extranjeros, por 40 españoles. “Estamos empezando a testar el desarrollo en estos mercados, para luego dar el siguiente paso a nivel internacional”, prosigue Vázquez, que admite que su objetivo es lograr el “liderazgo” a nivel mundial en lo que a la gestión deportiva se refiere.
La empresa, sin embargo, no se marca por ahora una cifra de franquiciados a medio o a largo plazo. Su idea, primero, es consolidar su producto y lograr que encaje en los mercados mencionados. Para ello, están desarrollando un modelo de franquicia que sea adaptable a cada región y a su idiosincrasia económica y deportiva.
“Creemos que nuestro modelo puede tener un encaje internacional, por eso intentamos dar los primeros pasos a nivel idiomático para que todo esté listo para llegar a estos países. Queremos probar la capacidad que tenemos para desarrollar estos nuevos mercados”, amplía. La disponibilidad de un amplio abanico de opciones permite a los franquiciados poder trabajar en base a aquellos deportes que mejor se adapten a sus respectivos mercados.
La central escucha al mercado a través del feedback que recibe de sus franquiciados, cuyos conocimientos sobre cada área geográfica son claves. “Buscamos perfiles que conozcan bien el mercado y que tengan buenos contactos y la capacidad de desarrollar ese conocimiento en un territorio”, anota Vázquez.
CARTERA DIVERSIFICADA
Su objetivo es claro: impulsar la gestión deportiva a través de una red que proporcione servicios deportivos de calidad y que sea capaz de gestionar eventos, competiciones, academias, campus e instalaciones deportivas.
A su vez, la diversificación del negocio supone una ventaja en tiempos de covid. “Aquellas franquicias que tenían más dependencia de los eventos deportivos han sufrido más, porque muchos se cancelaron, pero la mayoría de los franquiciados pudieron sostenerse gracias al resto de líneas de negocio, a las ayudas de las administraciones o a las que proporcionamos desde la central”, desarrolla el jefe de operaciones de Sportmadness.
A pesar de sufrir alguna baja durante la pandemia, lo cierto es que tanto en 2021 como en 2022, la compañía no ha dejado de recibir el interés de nuevos emprendedores interesados en franquiciarse. Este inicio de año, sin ir más lejos, ya ha abierto cinco nuevas franquicias: cuatro en España (Madrid, Salamanca, Cádiz y Pontevedra) y una en México (Ciudad de México).
Para poder acceder a la marca y trabajar con su know how, los emprendedores que se franquician pagan un canon inicial de 15.000 euros y una cuota mensual fija que varía en función del mercado (en España son unos 500 euros). Los franquiciados tienen acceso al asesoramiento y apoyo que les da la central en materia de branding, marketing, gestión del negocio o, si es preciso, ayuda a la hora de celebrar proyectos deportivos muy transversales, desde carreras a campus para niños. Los acuerdos que se firman, de unos cinco años, se pueden renovar automáticamente, sin requerir de otro pago de canon, si las dos partes están de acuerdo.
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