Synergym se propone abrir seis nuevos gimnasios hasta final de año

El objetivo de Synergym es concluir este 2020 con 36 centros, es decir, 12 más que los que tenía a la conclusión del pasado 2019. Estos planes están, por supuesto, condicionados por la evolución de la pandemia. “Si todo evoluciona bien, abriremos más en enero o febrero de 2021. Ahora estamos siendo más cautelosos”, reconoce el director general de la cadena, Jordi Bella.

La previsión del directivo para 2021 es recuperar el ritmo de aperturas que tenían marcado para antes del confinamiento, esto es, entre 10 y 15 nuevos gimnasios al año.

LA EXPANSIÓN COMPENSARÁ EL CONFINAMIENTO

Tras cerrar el pasado 2019 con una facturación cercana a los 10 millones de euros, el objetivo inicial para este 2020 de la cadena era aumentar significativamente dicha cifra de negocios. Sus planes, ahora, se ven condicionados por la evolución del Covid-19, que provoca el tener que abordar los objetivos en base a distintos escenarios de cara al segundo semestre del año.

De todos modos, al contar con más gimnasios que el año pasado, las previsiones de resultados económicos de Jordi Bella son que este ejercicio no será peor que 2019.

En clave de futuro, Synergym está trabajando para hacer mejoras a nivel de “gestión interna e identificación de nuevos locales o proveedores”. Con cierta cautela, se mantienen a la expectativa sobre la posibilidad de detectar nuevas oportunidades.

POCAS BAJAS

Según Bella, la pérdida de socios que ha sufrido Synergym durante el confinamiento ha sido mínima gracias a la proximidad que han mantenido con ellos. Su estrategia en este sentido, se ha basado en tres ejes: “Estar en constante contacto con nuestros clientes, asegurarles que no les cobraríamos cuotas y que les compensaríamos los días de cierre y, finalmente,  aportarles soluciones como entrenamientos en casa para mantener el vínculo con ellos”. Los contenidos online que Synergym ofrece a sus usuarios están incluidos en la cuota.

Gracias a estas prácticas han logrado que la respuesta de los abonados a sus centros haya sido, según el directivo,  “muy buena”. Según ha añadido, “tratamos de tener un servicio muy personalizado para que el socio vea que no dejamos de preparar y desarrollar iniciativas y que compartimos con él la información y los progresos que va haciendo”.

El directivo ha concluido que si les obligan a cerrar de nuevo algún centro, como les ha ocurrido con el que tienen en Barcelona, su idea es repetir las mismas prácticas que en el primer confinamiento.