Sharma Climbing inicia una nueva era. La cadena de rocódromos presidida por el escalador norteamericano Chris Charma ha incorporado al CEO de la consultoría deportiva Wuics, Pere Solanellas, como nuevo CEO para impulsar una nueva era basada en una gestión más profesionalizada de la compañía. El consultor liderará la sociedad y definirá un plan estratégico a través del cual transformará la empresa a nivel organizativo, económico y financiero, y que pretende extender la marca Sharma Climbing por diferentes puntos del territorio español, primero, y de todo el continente europeo, después. 

Solanellas coge el relevo de la hasta hace pocos meses directora de operaciones de la enseña, Jimena Alarcón, quien como ya explicó CMDsport en mayo cesó en el cargo por motivos personales, aunque seguirá vinculada a la compañía para temas estratégicos. Uno de los primeros retos del consultor será potenciar el plan de crecimiento de Sharma Climbing. 

Según explica a este medio, la intención de la cadena es “poder llegar a gestionar entre 10 y 15 rocódromos en España en 2025”. Teniendo en cuenta que Sharma Climbing gestiona actualmente tres locales (en Barcelona, Madrid y Gavà), la voluntad de la empresa es lograr abrir entre dos y tres rocódromos de media en 2023, 2024 y 2025. Actualmente ya están valorando entre cinco y 10 proyectos en España. 

La apuesta de Sharma Climbing es clara: no quieren crecer “a cualquier precio” con centros pequeños, sino que quieren “apostar por rocódromos grandes y emblemáticos en ciudades emblemáticas”. Tras culminar la ampliación de su centro en Barcelona, la cadena gestiona actualmente unos 11.300 metros cuadrados en sus tres instalaciones. 

EL SIGUIENTE, EN VALENCIA

El siguiente rocódromo que gestionarán, si no hay ningún imprevisto en los próximos meses, será en Valencia. La cadena espera poder tener firmado este proyecto, que ya se encuentra en fase “muy avanzada” antes de terminar 2022. Se ubicará en una nave industrial donde, de hecho, ya han empezado a realizar trabajos de arquitectura y con proveedores. La propiedad de la nave en cuestión adecuará el espacio y será la cadena la que afronte la inversión. Si no hay imprevistos, será su cuarto rocódromo en España. 

La idea de Sharma Climbing es crecer de forma orgánica creando rocódromos de cero en grandes naves industriales, aunque no descarta hacerlo de forma inorgánica adquiriendo rocódromos ya creados que están en venta y que puedan adaptar con algunas reformas. “Si surge alguna oportunidad también la estudiaremos”, admite Solanellas, quien reconoce que ya están analizando un par de ofrecimientos que han recibido. 

La enseña, que cerró 2021 con unos ingresos de 3,3 millones de euros y espera girar 5,3 este 2022, tirará de recursos propios para financiar la fase inicial de su crecimiento. Para poder llegar a entre 10 y 15 rocódromos, sin embargo, contempla la posibilidad de que entre capital externo o fondos de inversión a través de alguna ronda de capital. Según ha podido saber CMDsport, la compañía buscará entre 6 y 7 millones de euros. 

Sharma Climbing inauguró a finales de 2015 su primer rocódromo en España en Barcelona, instalación que este viernes, 15 de julio, estrenará una ampliación que le permitirá crecer hasta los 2.300 metros cuadrados. También en plena pandemia ha invertido 5,5 millones de euros en inaugurar otras dos instalaciones. En noviembre de 2020 estrenó en Madrid un rocódromo de 4.000 metros cuadrados (con un gimnasio de 400 m2) en el que invirtieron más de dos millones de euros. Menos de un año después, en septiembre de 2021, inauguró en Gavà (Barcelona) el mayor rocódromo de España, un espacio de cerca de 5.000 metros cuadrados en el que invirtieron unos 3,5 millones de euros. 

EUROPA EN EL HORIZONTE

Una vez logre ampliar y consolidar una gran red de rocódromos en España, Sharma Climbing intentará expandirse en Europa. “Este negocio está viviendo un boom que hay que aprovechar. En países como Francia, Italia o Suiza, con montañas, donde la escalada también está en auge y hay mucha afición de gente que no puede ir en su día a día a la montaña, pero puede en cambio entrenar en algún rocódromo que se encuentre más cerca de su trabajo”, expone Solanellas. 

El nuevo CEO de Sharma Climbing constata que la vocación de la compañía “es internacional”. De hecho, el consejo de administración de la sociedad que dirige la enseña está formado por dos norteamericanos, un inglés, un francés, un suizo y solamente un español, Solanellas. 

Más complejo, en cambio, se presenta un posible desembarco en los Estados Unidos. La sociedad Sharma Climbing, controlada por Chris Sharma y otros cuatro socios, tiene los derechos para explotar esta marca por Europa. Su fundador se reserva la posibilidad de crear en un futuro una estructura de rocódromos en su país de origen. Una opción que aún no tiene fechas y que podría articularse tanto de forma independiente como a través de Sharma Climbing. 

APUESTA POR EL LA FIDELIZACIÓN Y EL FITNESS

El fitness jugará un papel clave dentro de la transformación interna que vivirá Sharma Climbing. Los tres rocódromos de la cadena ya cuentan con gimnasios propios equipados por Matrix que quieren ampliar y potenciar como un servicio más para sus usuarios. “Nuestro claim es ‘Climbing & Fitness”, queremos que los usuarios puedan elegir qué hacer en nuestros centros, desde escalar a hacer yoga o ir a la sala de fitness. Queremos empezar a hacer una parrilla de actividades dirigidas”, anuncia Solanellas. 

Otro de los impulsos que quiere darle su nuevo CEO es el paso de los ‘pass day’, o entradas puntuales de día, a las cuotas mensuales o anuales. “A partir de septiembre empezaremos a focalizarnos más en el abono, queremos fidelizar más a la gente que viene”, anticipa.