Alertan del aumento de dificultades en el suministro “a medida que se acerque la Navidad”

“La globalización nos ofrece cosas extraordinarias pero también tiene muchas grietas, en el momento que falla una parte de la ecuación, todo se desmorona y se produce un crack”. Son palabras del presidente de la Asociación Española del Retail (AER), Laureano Turienzo, quién asegura que la dependencia del mercado europeo respecto a China en cuanto a la fabricación es ahora muy negativa, en un contexto de atasco en la entrega de mercaderías y de auge de los precios.

El experto en retail sitúa el origen del problema actual en las cadenas de suministro en el cierre del puerto de Jian Tian durante meses, lo que ha supuesto la creación de un cuello de botella para entregar el material que “será muy difícil de superar, como mínimo, hasta 2022”.

ALMACENES COLAPSADOS

Según describe, miles de productos se encuentran en las instalaciones de las fábricas a la espera de poder ser transportados, lo que ya de por sí supone un grave problema para los centros fabriles al no disponer de más espacio. Incluso algunos de ellos, apunta el presidente de la AER, ya han empezado a dipositar parte de la mercancía en zonas exteriores, “a la intemperie”.

Los que compren mayores volúmenes, serán los primeros en recibir producto

Turienzo sostiene que la falta de stock se va a agudizar todavía más “a medida que se acerque la Navidad”, lo que “podría poner en jaque una campaña que es clave para la gran mayoría de operadores”. Además, señala que el alza en los precios del transporte es cada vez más insostenible para muchas empresas.

POLARIZACIÓN

La falta de stock será más crítica, durante los próximos meses, para todos aquellos retailers con volúmenes reducidos de compra. “Los chinos siempre aplican una estrategia de economía de escala, por lo tanto, los que compren mayores volúmenes, serán los primeros en recibir producto”, declara Turienzo.

Amazon, como principal retailer en Europa y España, se va a ver muy afectado por las dificultades en el suministro

El presidente de la AER señala que Amazon, como principal retailer en Europa y España, se va a ver muy afectado por las dificultades en el suministro pero eso no va a suponer, automáticamente, que el resto de operadores se vean beneficiados. “Amazon no tendrá aquellos productos que tampoco tengan el resto de sus competidores”, remarca.

Eso sí, la falta de stock del gigante norteamericano en España se prevé mayor que en el caso de otros países como Alemania. “Mientras que en nuestro país, un 62% de los vendedores del marketplace de Amazon son chinos, en Alemania son sólo la mitad”, explica Turienzo.

Acercar de la producción

El contexto de escasez en algunos productos y de retrasos en la mayoría de las entregas desde Asia, va a hacer, según Turienzo, que la mayoría de marcas se planteen una producción más próxima, dentro del continente europeo. “Ya estamos asistiendo a la puesta en marcha de nuevas fábricas en países de Europa del este y esta tendencia se agudizará en los próximos años”, augura.

El problema, ahora, es llenar de productos los lineales de las tiendas

Ahora bien, el presidente de la AER advierte que acortar la cadena de suministro supone un incremento de los costes de producción, en comparación con los bajos costes de China, “por lo que lo más probable es que se produzca una inflación en los precios”. Serían los consumidores finales los que tendrían que absorber las subidas en los PVP.

Rebrote del consumo

Las dificultades con el suministro llegan en un contexto de recuperación constante de la demanda. “El problema, ahora, es llenar de productos los lineales de las tiendas”, reconocía hace pocos días un detallista a CMDsport.

En global, todavía no nos hemos recuperado del todo, pero vamos en camino de ello

“En general, se está produciendo un regreso a las tiendas físicas y en algunos sectores ya estamos por encima de los datos de consumo de 2019. En global, todavía no nos hemos recuperado del todo, pero vamos en camino de ello”, afirma Laureano Turienzo.

El presidente de la AER se muestra optimista, en este sentido, porque “18 millones de españoles, que no han perdido su trabajo con la pandemia, nunca habían ahorrado tanto como ahora”.