Ispo: barómetro de inquietud

Dicen que las ferias son el mejor barómetro para medir el grado de salud y/o inquietud del sector que la protagoniza. La Ispo de Múnich, que hoy inicia su segunda jornada (se prolongará hasta pasado mañana, miércoles) es un ejemplo de ello. Aún a pesar de que esta edición registra una participación récord de expositores españoles (61) y que la afluencia de visitantes mantiene sus cuotas de las dos ediciones anteriores, se detecta en el ambiente preocupación.

STOCKS DE OUTDOOR

Y es que la falta de frío y nieve no ha sido un problema que haya afectado sólo al mercado español. El director comercial de Ternua, Michel Gogniat, me decía ayer por la mañana en su stand que “eso (la falta de frío) también se ha dado en el resto de Europa, en el mercado asiático y en ciertas zonas de Estados Unidos”. Gogniat no dudó en reconocer que “presagiamos un sell in complejo para la campaña otoño-invierno 2016-2017”.

CMD está presente en esta Ispo junto a las revistas profesionales de Europa.

Esta afirmación me fue corroborada posteriormente por fuentes de otras marcas de montaña. Una de ellas asumía su inquietud “porque, a las alturas de campaña de invierno que estamos, sigue habiendo mucho género en las tiendas y es de todas las marcas”.

MÁS STOCKS AÚN EN NIEVE

Si la inquietud es notoria entre los proveedores de montaña ésta alcanza índices superiores entre las marcas de deportes de nieve. Jordi Ribó, responsable de la zona de Cataluña y Andorra de Salomon, me comentaba también ayer que “en esta campaña blanca solo se han ‘salvado’ Baqueira, Andorra y, en cierto modo, La Molina y Masella. En Sierra Nevada han tenido poquísima nieve y en otras zonas del país, casi nada o nada”.

EL ALQUILER DE ESQUÍS SE IMPONE A LA VENTA

A la problemática de la escasez de nieve se le suma, asimismo, la cada vez mayor propensión de los consumidores españoles a alquilar, sobre todo esquís y tablas de Snow, en detrimento de la compra. Jordi Ribó, de Salomon, me reconocía que “algunos detallistas ya están al corriente del auge del alquiler en detrimento de la venta”. A continuación, como prueba de ello, me comentó que, en los resultados de ventas de esquís de Salomon en la campaña pasada 2014-2015, “las ventas fueron de un 65% para las líneas de alquiler y el 35% restante para las de venta”. En ese sentido Ribó lanzó como recomendación a los detallistas que aún no abordan el alquiler de esquís que “prueben de introducirlo en sus tiendas porque es una tendencia en claro aumento y que ya tiene en muchos países europeos un firme precedente”.

Fuentes de Head también secundaron esa fuerte pujanza del sell in en las líneas de alquiler en detrimento de la venta.

LOS MEJOR POSICIONADOS, LOS MENOS DESFAVORECIDOS

La evolución del sell out de este invierno va a reactivar aún más si cabe la propensión de los detallistas a programar sobre las marcas con mejor posicionamiento y que, consecuentemente, cuentan con mayores garantías teóricas de una buena salida de tienda. Esa es, al menos, la esperanza que me reconocieron los responsables de algunas marcas de deportes de montaña que exponen en la feria.

De todos modos, como ya ha publicado CMDsport en esta web y en su revista impresa de la segunda quincena de este mes de enero, cada vez son más los detallistas que anuncian su intención de que en este sell in ya van a empezar a aplicar su política de programar a aquellas marcas que “mejor se portan con nosotros y más nos apoyan en el sell out sin interferencias como las ventas a través de sus webs o sus propias tiendas”.

Al respecto, el máximo responsable de la marca +8000, Alfredo Peñalver, me reconocía ayer que “¡ojalá eso se cumpla! Ojalá las tiendas fueran realmente selectivas en ese aspecto y trabajasen más con aquellas marcas que las apoyamos y respetamos su trabajo”.

MÁS ALLÁ DEL OUTDOOR

Los problemas de stocks que puedan sufrir las tiendas con los stocks de deportes de montaña no son ajenos al resto de suministradores. El máximo responsable de Happy Dance, Gonzalo Magaña, me reconocía al final de la jornada de ayer en la Ispo que “una campaña mala de invierno por falta de frío y nieve es mala para todo el sector”.

Magaña reconoció que “en estos momentos hay muchas tiendas que andan justas de dinero porque no han hecho caja en la temporada de ventas ‘normal’ y en la de rebajas tampoco les ha ido muy boyante, con lo cual, es probable que también tendrán problemas para obtener crédito en los bancos”.

¿NUEVOS TIEMPOS DE ESTRECHECES?

Magaña, algo ‘apocalíptico’ ayer, concluyó al respecto vaticinando “veremos qué sucede, pero pueden venir, o volver, tiempos de nuevas estrecheces, morosidad, cierres y, muy probablemente este sell in para el frío 2016-2017 será muy ajustado por falta de liquidez en muchas tiendas”.

Otro proveedor, en este caso de montaña, sin embargo, subrayó que estamos ante un sell in “que no induce a la euforia pero tampoco al catastrofismo”.

Veremos quién acaba llevando razón. Por de pronto, todas ‘las velas’ están puestas para que la primavera arranque cuando debe porque solo faltaría, como dijo Magaña, “que a los altos stocks de invierno se le sumasen los del calor 2016”.