Quantcast

ESENCI@L

El detallista señala un mal arranque de temporada blanca

Intersport Jorri insta a las marcas a decidir “en qué tipo de distribución quieren estar”

intersport jorri

Fachada de Intersport Jorri, en Jaca.

(23-1-2019). José Ricardo Abad, propietario de Intersport Jorri, dice que la temporada blanca 2018-19 arrancó mal, pero que aún queda margen para salvarla. El detallista valora que la situación del mercado del esquí en España atraviesa un momento complicado y pide más cooperación de los proveedores.

“La situación del mercado del esquí es complicada”. Así lo percibe José Ricardo Abad, propietario de las tiendas Intersport Jorri, Intersport Rent y Karay, todas ellas ubicadas en Jaca. El minorista apunta a la aparición de dos competidores que no existían hace dos décadas: Decathlon, que no estaba implantando aún con tanta fuerza en España, y el comercio online. Sobre este último, al que tilda de “fenómeno preocupante”, señala que “el 90% de los operadores de Internet están inmersos en una guerra de precios atroz”.

En este sentido, Abad sostiene que “las marcas y los proveedores tienen la sartén por el mango y deben decidir en qué tipo de distribución quieren estar presentes”. Augura que, de cara al futuro, tal vez las tiendas especializadas tengan que funcionar como el showroom de las marcas, lo que requerirá “algún tipo de ayuda” por parte de los proveedores. “No se trata de emprender una guerra contra los suministradores –incide-, sino de salvar este negocio. Porque la nieve engancha y tiene tirón, de eso no cabe duda”.

Un mal arranque de temporada

José Ricardo Abad no está satisfecho del arranque de esta temporada blanca 2018-19. Dice que ha faltado nieve en el Pirineo. “Felicito a Masella, que pudo abrir antes de tiempo, y Sierra Nevada también está funcionando bien. El público de Madrid, al haber poca nieve en el Pirineo, se dirige hacia allí”, comenta.

Todavía hay margen, no para una buena temporada pero sí para salvarla

El propietario de Intersport Jorri indica que su zona ha estado “bajo mínimos” de nieve, lo que perjudica al consumo. “En este sector compramos en firme, con inversiones muy altas, y el problema es poder pagar a los proveedores”, añade.

Aun así, afirma que si la nieve llega a tiempo “se trabaja bien” y asegura que “todavía hay margen no para una buena temporada pero sí para salvarla”. Lamenta que se haya perdido diciembre, que es el mes más fuerte del año en facturación, y prácticamente también enero. “Una estación como Formigal, con casi 150 kilómetros de pistas, sólo pudo abrir 15. Y Candanchú y Astún pusieron en funcionamiento la misma cifra durante esos meses. Todo gracias a la nieve artificial”, explica.


No hay comentarios

Añade el tuyo