La General Surfera también planta cara al showrooming

No es la primera tienda de esquí española que comunica a los clientes que el servicio de asesoramiento, el termoformado y la prueba de botas tiene un precio. Desde que el comercio Tecnisport de Burgos tomó esta decisión en 2012, otros detallistas, cansados de ser ‘el probador de Internet’, han seguido sus pasos. Aun así, por miedo a la reacción del consumidor, son pocos los negocios que se han atrevido a dar este paso, si bien la mayoría aplauden la medida.

El propietario de La General Surfera, Sergi Mur, dice que se ha sumado a la iniciativa “por supervivencia” y explica que “cuando compras un producto en una tienda especializada, hay que entender que el precio no sólo incluye el producto en cuestión, sino también todo el asesoramiento y los conocimientos del especialista. El objetivo es vender, pero vender bien, y eso no lo puede garantizar Internet”.

Un usuario con mucha información

El minorista indica que hoy día el cliente llega a la tienda con mucha información, ya que antes ha consultado webs especializadas, foros, etc. y tiene la compra “muy encarada”. “El último paso es probar –sostiene- y contrastar todos los datos que ha recopilado antes, pero muchas veces nuestras explicaciones no cuadran con esa información. El cliente tiene que entender que el precio incluye el asesoramiento”.

Es por esto que La General Surfera, ubicada en Barcelona y una de las surf shops más grandes de España, colgó ya hace dos años en el establecimiento un cartel en el que anuncia que se cobrarán 30 euros por el asesoramiento, el termoformado y la prueba de botas de snowboard. Si el cliente compra el producto, este servicio no se paga. Mur precisa que también han fijado un límite y que la idea es aplicar este coste a partir de que el usuario se pruebe tres pares de botas.

El 99% de nuestros clientes entiende perfectamente que sólo tratamos de poner en valor nuestro trabajo

Medida disuasoria

Sin embargo, el responsable de La General Surfera asegura que aún no se ha llegado a cobrar a nadie por probar las botas de snowboard, por lo que la medida tiene más bien un carácter disuasorio. “El 99% de nuestros clientes entiende perfectamente que sólo tratamos de poner en valor nuestro trabajo, mientras que hay un 1% que se molesta”, señala, “somos especialistas en snowboard desde hace 25 años”.

A la expectativa de la nueva temporada

Sergi Mur valora que la situación de los comercios especialistas de deportes de nieve “es complicada” y se muestra a la expectativa de la evolución de esta temporada blanca. “Arrancó muy bien pero ahora se ha ralentizado un poco”, observa el detallista, quien recuerda que también el comienzo del año pasado fue muy bueno y luego se paró en seco.

Sobre la evolución de este 2019, indica una bajada en el textil y el calzado de calle, mientras que el producto más técnico se ha dinamizado. La previsión es cerrar el ejercicio con una “ligerísima subida”, respecto al año pasado.