Joola se abre paso en España gracias a “la calidad” del bote de sus mesas

Cuando Kettler comunicó en 2019  a BM Sportech que dejaría de servir sus productos de fitness y tenis de mesa porque estaba en bancarrota, la distribuidora aragonesa se puso manos a la obra para encontrar otra marca que sustituyera el vacío dejado en el mercado. Los mismos responsables de Kettler hablaron al equipo de Néstor Pardo sobre la marca alemana Joola, que ha sido patrocinadora de varios Juegos Olímpicos, proveyendo las mesas de juego.

En octubre del año pasado, BM Sportech asumía oficialmente la distribución de Joola en España, Portugal y Andorra, tras un primer medio de año de pandemia en el que se produjo un notable boom en la demanda de productos de tenis de mesa. De hecho, Pardo reconoce que en pocas semanas, tras decretar el confinamiento domiciliario, “acabamos con las existencias que nos quedaban de Kettler y que pensábamos que nos durarían una año y medio”.

La línea de ocio

La marca alemana cuenta con dos líneas de trabajo, una con material más dirigido a profesionales y otra al público en general que ve en el ping pong una actividad de ocio. Inicialmente, BM Sportech ha puesto el foco en la segunda línea de negocio, con el objetivo a medio plazo de cubrir las ventas en la categoría de Kettler, ya muy asentadas dentro de la distribuidora.

Preguntado por cuáles son las ventajas competitivas de las mesas de Joola, Pardo se refiere “a la calidad de su bote, que es excepcional para alguien no profesional, la robustez y la certificación que ofrece al haber sido marca proveedora en varios Juegos Olímpicos”.

La enseña ofrece tanto mesas de interior como de exterior, si bien éstas últimas se venden más “porque son prácticamente indestructibles y la diferencia de precio no es tan grande”, señala el director comercial. Las mesas de Joola se sitúan en las gamas medias y altas del mercado, diferenciándose del producto de gama baja que ofrecen otros proveedores nacionales.

Ahora bien, Joola también cuenta con un amplío catálogo de palas ya montadas y otros accesorios para la práctica del ping pong. Si bien las mesas suponen el grueso de la facturación para BM Sportech, con precios que oscilan entre 399 euros hasta los 1.700, las referencias más vendidas son las palas y las pelotas.

Un mercado poco competido

Néstor Pardo asegura que no existe mucha competencia en el mercado de ping pong en España, al ser un nicho más reducido comercialmente, aunque con la pandemia ha salido reforzado. Su margen de crecimiento y volumen de facturación no llega a los niveles del pádel, que lleva un año con números disparados, o el tenis, con una demanda más estabilizada pero al alza.

Uno de los principales problemas es que la práctica del ping pong se produce, esencialmente, en viviendas particulares, “y no todas disponen del espacio necesario para instalar una mesa”, señala Pardo, quién afirma que, normalmente, se necesitan más de 20 metros cuadrados para poder jugar con cierta comodidad.

Evolución positiva de las ventas

Desde BM Sportech valoran positivamente las ventas de Joola desde octubre pasado y confían en alcanzar la facturación de Kettler a medio plazo. Para ello, han seguido la misma política de distribución, contactando con clientes que están interesados en vender productos de tenis de mesa. Uno de los principales clientes de la marca alemana en España es El Corte Inglés.

Por último, Néstor Pardo baraja la posibilidad de trabajar más a fondo la línea de profesionales de Joola en un futuro. La distribuidora ya atiende algunos pedidos puntuales, mientras que el grueso de sus ventas es a tiendas que venden a particulares.