(7-5-2015). El próximo mes de julio las marcas mejor posicionadas de ciclismo arrancarán ya la ronda de presentaciones de su gama 2016. Detallistas aseguran que es contraproducente que la llegada de las novedades coincida con el verano.
El mes de julio, e incluso un poco antes, se ha vuelto habitual para las presentaciones de la nueva gama. Las grandes marcas reúnen a sus puntos de venta para enseñarles la colección y dar el pistoletazo de salida a las programaciones. Algunos modelos tardan meses en llegar, pero otros aterrizan en tienda ya en pleno verano, coincidiendo con la campaña de rebajas. Hemos hablado con algunos detallistas, que denuncian cada vez más premura en las presentaciones.
Clemente Chao, propietario de la cadena Bicitotal, sostiene que “en los últimos años los principales proveedores han adelantado las presentaciones. Si hace 10 años el nuevo producto nos llegaba a tienda en octubre, ahora ya empezamos a recibir novedades en julio”. Los minoristas consultados coinciden en que en los dos o tres últimos años el mes de julio se ha estandarizado como momento para las presentaciones de las marcas.
Chao se muestra más partidario del formato anterior, cuando el nuevo producto llegaba a finales de año “para compensar el bajón de ventas del otoño”. Pedro Maestre, propietario de Maestre Bikes, explica que presentar tan temprano “es un error de las marcas porque es precisamente cuando más se vende y además a su precio, por lo que es absurdo que las liquidaciones coincidan con la llegada del nuevo producto”.
Con él está de acuerdo José Fresco, propietario de los Trek Bicycle Stores de Galicia, quien destaca que “siempre he sostenido que el mes de julio es demasiado temprano para convocar las presentaciones. Sería más conveniente poder compensar los meses flojos de octubre y noviembre con la llegada de las novedades”.
Remigio Rovira, propietario de Vadebicis, señala por su parte que “es una locura, se están mostrando las nuevas gamas demasiado pronto y mi sensación es que cada vez se avanzan más, de hecho voy a una presentación ya a mediados de mayo. En agosto ya tenemos en tienda algunos de los nuevos modelos”. El detallista subraya que “hay que calcular muy bien las previsiones e intentar no disponer de sobrestock en esas fechas de verano. A partir de la primavera, no merece la pena comprar las bicis a su precio porque te verás obligado a liquidarlas con la llegada del nuevo producto”.
“Contraproducente”
Pero los minoristas también plantean que la realización de la presentación en los meses de junio o julio puede ser “contraproducente” para los propios proveedores por las dificultades posteriores para servir modelos, unos problemas que se han hecho más patentes en las últimas temporadas.
De este modo, José Fresco argumenta que “las propias marcas se pisan porque hay modelos programados en verano que no llegan a los mínimos de fabricación y luego no se sirven, así como bicicletas por las que tenemos que esperar muchos meses”.
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