Cross Funcional 30′ abre su cuarto gimnasio y ultima su entrada en Barcelona

La propuesta del boutique Cross Funcional 30′, impulsada hace seis años por el entrenador y nutricionista Javier Ureña, sigue dando pasos para consolidarse en el mercado catalán, y también nacional.

Tras arrancar a principios de 2019 su proyecto de franquicias y abrir en el pasado año dos estudios franquiciados en Terrassa (Barcelona) y Alicante, este próximo sábado 8 de febrero abrirá las puertas del que se convertirá en el cuarto centro de la cadena, y el tercero en régimen de franquicia.

El nuevo club se ubica en la localidad también catalana de Cerdanyola del Vallès, reforzando así la presencia de la marca en la región, donde ya opera con su primer club en Sabadell y el ya mencionado abierto hace unos meses en Terrassa.

Estética propiamente boutique

Como en las últimas aperturas de la cadena, el nuevo centro de Cerdanyola, situado en número 3 de la calle Sant Francesc, abrirá en régimen de franquicia, modelo que Cross Funcional 30′ puso en práctica en el pasado 2019 con la intención de reproducir su propuesta con sello personal en nuevas ubicaciones.

El centro dispone de 200 m2 de superficie y presenta las mismas características de diseño, servicio y metodología que el resto de clubes de la franquicia. Sin embargo, como novedad, esta nueva apertura incluye ciertas mejoras estéticas que “lo acercan más al concepto que se tiene hoy de boutique en cuanto apariencia”, admite Ureña. En concreto, incluye nuevos juegos de luces de distinto diseño para cada zona de entrenamiento, siendo la iluminación en el área de entrenamiento funcional especialmente pensadas para ambientar y dictar el ritmo de entrenamiento.

Debut en Barcelona

Tras esta apertura, está previsto que Cross Funcional 30′ haga su debut en el competitivo mercado barcelonés en marzo. Será también con un club franquiciado cuya ubicación se encuentra en el distrito de Sants-Montjuïc, y que previsiblemente presentará unas características muy similares al resto de gimnasios de la cadena. “El modelo funciona y está diseñado para ser reproducible en otras localizaciones”, apunta su creador, Javier Ureña.

El objetivo del empresario es no pararse aquí y seguir ampliando la huella de la marca en los próximos meses, no descartándose la apertura de algún centro más fuera de Catalunya, donde por el momento Cross Funcional 30′ tan solo tiene presencia en Alicante. Entre las opciones, el norte peninsular sería el mejor posicionado.

Ureña explica que, si bien, tiene intención de abrir algún centro de gestión propia más en un futuro, “por el momento nos centraremos en la franquicia, que está dando muy buenos resultados, obteniendo muchas solicitudes de interesados en convertirse en franquiciados”. Hasta la fecha, los centros abiertos y por inaugurar estarán gestionados por nuevos franquiciados de la marca, aunque algunos ya han confirmado su intención de convertirse en multifranquicia y abrir nuevos clubes de la cadena en un futuro.

Método propio consolidado

Cross Funcional 30′ se cimenta sobre el método de entrenamiento creado por el propio Javier Ureña hace ahora seis años, basado en el entrenamiento funcional. Este método combina ejercicios en un circuito de alta intensidad interválico con un circuito de tonificación muscular, con una duración total que no supera los 30 minutos. Este concepto propone tanto entrenamientos personales como en grupos reducidos.

Los entrenamientos son guiados por entrenadores personales y se complementan con un plan de nutrición y control de peso corporal mensual que se realiza mediante un estudio antropométrico.

Además, los usuarios del centro disponen de acceso a la app donde se indican los distintos programas de entrenamiento, así como una monitorización continua de sus constantes durante las sesiones de entrenamiento, a través de uso de pulsómetros de la marca deportiva Polar.

El éxito de la acogida que está teniendo Cross Funcional 30′, apunta Ureña, es “que ofrecemos una propuesta con la que se lo ponemos muy fácil al cliente”. Sus centros presentan una superficie media de 200m2, con una capacidad máxima para entre 150 y 200 clientes.