Gaia se deshace de tres concesiones en Galicia tras meses de conflictos

El conflicto por la gestión de los centros deportivos de Elviña, A Sardiñeira y Agra, que ha enfrenado en los últimos meses a la empresa Gaia y la Xunta de Galicia, se ha saldado finalmente con la rescisión del contrato de mutuo acuerdo y con la previsión de volver a sacar a concurso la concesión de las tres instalaciones.

Se pone fin así a un largo desacuerdo entre Xunta y Gaia, con procesos judiciales cruzados, por las condiciones del canon de adjudicación y la financiación de las obras de mantenimiento, según informan medios gallegos.

Ambas partes han acordado en el convenio para la rescisión del contrato que la actual concesionaria, es decir Gaia, garantice la continuidad del servicio hasta que se resuelva la nueva adjudicación, asegurando que la resolución del caso no afecte a los más de 10.000 usuarios que suman los tres complejos.

La Fundación Deporte Galego ha anunciado la publicación de un nuevo concurso para adjudicar la concesión, si bien ha indicado que por el momento no es posible dar una fecha concreta sobre el cambio de concesión, ya que se están elaborando los nuevos pliegos de condiciones, en los que se recogerá explícitamente que el adjudicatario deberá hacer frente a las obras de modernización de las instalaciones.

Según la Administración, la continuidad del contrato actual “no es aconsejable por claras razones de interés público”, ya que la adecuación del contrato a las resoluciones judiciales “exige una serie de inversiones de importe muy elevado”.

Tras esta resolución, Gaia cesa la gestión de estos tres complejos deportivos que operaban bajo la marca de Aqa Complexos, manteniendo la gestión de cuatro instalaciones ubicadas en Ourense, Madrid y Valencia (dos centros).

El pasado 2017, Gaia ya dejó la gestión de los centros El Torcal y Trinidad, ambos en Málaga, argumentando “pérdidas económicas que hacían inviables el mantenimiento de los centros”. En ambos casos, tomó el relevo de la concesión la empresa Forus.