(1-9-2021). La llegada del mes de septiembre no ha exonerado a los gimnasios de las restricciones impuestas por el covid. El sector arranca una campaña crucial en la que espera recuperar un gran volumen de abonados, pero las medidas para hacer frente a la pandemia retrasarán una recuperación que se prevé más lenta de lo esperada.
El final de las vacaciones veraniegas no ha servido para eliminar las restricciones que afectan a los gimnasios. Las restricciones de aforo, la obligación de respetar la distancia social, el uso de las mascarillas e, incluso, algunos cierres son conceptos que seguirán acompañando al fitness español en las próximas semanas, muy probablemente hasta finales de año.
La comunidad que aplica en la actualidad unas restricciones más severas es, de lejos, Galicia. La Xunta establece el cierre de la actividad en los espacios interiores de establecimientos como los gimnasios para el nivel máximo de restricciones.
Este nivel de alerta afectó a principios de agosto, y durante un plazo de dos semanas, a tres concellos gallegos: Viveiro, Burela y Foz. Sus centros deportivos tuvieron que cerrar sus espacios interiores. Lo mismo les ocurre, desde el pasado sábado y por un plazo aún indeterminado -difícilmente bajará de las dos semanas- a los municipios de Ordes y Monforte.
MALESTAR EN GALICIA
Empresarios del sector de estos municipios han expresado su malestar al entender que los cierres resultan desproporcionados dado que los gimnasios se han demostrado espacios seguros, y más con los porcentajes de vacunación actuales. Son los primeros cierres de gimnasios que se registran en España desde que a principios de junio se registrasen los últimos, también en Galicia y en algunos territorios de Cantabria.
Para los demás niveles de alerta, el Ejecutivo gallego permite aforos que van del 50% al 75% en espacios interiores y exteriores. Más estricta es la normativa que afecta a los límites de usuarios en clases colectivas: entre seis y diez personas, sin importar el tamaño de la sala.
Por su parte, Asturias, con 30 personas, es la comunidad que más usuarios permite en la actualidad en las clases colectivas interiores. La siguen Navarra, Castilla-La Mancha y Castilla y León, con 25.
LOS MAYORES AFOROS, EN CASTILLA Y LEÓN
Castilla y León es la comunidad que inicia este septiembre permitiendo un aforo más alto en los espacios interiores de los gimnasios: un 85%. Ninguna otra comunidad alcanza el 80%.
Se quedan en el 75% los municipios que se encuentran en el nivel 1 de alerta en Andalucía, Aragón, Asturias, Baleares, Canarias, La Rioja y Murcia. Muy cerca se encuentra Cataluña, con un 70%. Muy pocas zonas de estas comunidades se encuentran en niveles de alerta superiores que limitan el aforo hasta un mínimo del 33%.
Por detrás de los territorios mencionados quedan Castilla-La Mancha y País Vasco (60%), la Comunidad de Madrid y la Comunidad Valenciana (50%), las zonas con unos aforos máximos permitidos más restrictivos.
Aunque las actividades outdoor gozan en la mayoría de territorios de aforos ligeramente superiores a los indoor (en la mayoría de territorios son los mismos), hay dos comunidades, Baleares y Castilla y León, que desde hace algunos días permiten el 100% del aforo permitido en los espacios exteriores de las zonas que estén en el nivel más bajo de alerta.
MASCARILLAS EN TODAS PARTES
Las mascarillas seguirán siendo la ‘medida estrella’ de cara a la vuelta de septiembre. Todas las comunidades, sin excepción, obligan a utilizarlas dentro de los gimnasios, y sólo algunas permiten no usarlas en espacios exteriores siempre y cuando se respete una determinada distancia de seguridad.
Según diversos operadores consultados por CMDsport, la mascarilla es, de lejos, la restricción que más frena el regreso de los abonados a los gimnasios. El sector empieza a asumir que deberán mantenerlas hasta principios de 2022, con los consecuentes daños económicos que esto supondrá.
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