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10 beneficios y varias recomendaciones

Claves del ejercicio físico para cuidar nuestra salud mental

Claves del ejercicio físico para cuidar nuestra salud mental

El ejercicio físico nos obliga a colocar nuestra mente en unas técnicas y objetivos que luego revierten en nosotros en forma de entretenimiento, diversión, mejora de nuestro aspecto, relaciones sociales, fortalecimiento de nuestra atención, constancia y compromiso. Imagen: Sanivpetro.

(14-1-2022). La salud mental es un estado de bienestar psicológico y emocional que podemos cuidar a través del ejercicio físico. Rafael San Román, psicólogo de ifeel, nos da las claves de cómo proceder, los beneficios que aporta y las precauciones que debemos tomar.

Desde el inicio de la pandemia, numerosos especialistas y estudios han destacado el auge de problemas y patologías relacionadas con la salud mental, un aspecto que podemos cuidar en nuestro día a día gracias al ejercicio físico. Rafael San Román, psicólogo en ifeel, una plataforma de bienestar emocional y apoyo psicológico para individuos y organizaciones, explica que las personas “somos una unidad cuerpo-mente. Por ello, movilizar, ejercitar y cuidar la parte física (en este caso, a través de algún tipo de deporte), tiene necesariamente un impacto positivo en la parte psicológica, siempre que nuestra práctica sea adecuada”.

Rafael San Román, psicólogo de ifeel.

San Román, afirma que nuestro cuerpo es una herramienta para comunicarnos, definirnos y estar en el mundo. La actividad física, más o menos estructurada e intensa, facilita que ese cuerpo esté saludable, que nos veamos bien, que regulemos nuestra experiencia emocional y mental. A veces nos pone en contacto con otras personas, otros ambientes, espacios en los que no habíamos estado.

El psicólogo añade que “no es necesario convertirnos en grandes deportistas, hay muchas maneras de estar activos. El ejercicio físico nos obliga a colocar nuestra mente en unas técnicas y objetivos que luego revierten en nosotros en forma de entretenimiento, diversión, mejora de nuestro aspecto, relaciones sociales, fortalecimiento de nuestra atención, constancia y compromiso. Además, nos permite dar un paso adelante en nuestro conocimiento de nosotros mismos. Si esto lo incorporamos a nuestra vida como hábito cotidiano es muy favorable para la salud psicológica”.

10 beneficios

Rafael San Román enumera diez beneficios concretos:

  1. Ayuda a focalizar la atención en un objetivo importante para nosotros que nos gratifica al lograrlo.
  2. Es entretenido y, en ocasiones, divertido.
  3. Puede ayudarnos a socializar y generar lazos con otras personas.
  4. La mejora de nuestra forma física impacta positivamente en nuestra autoimagen.
  5. Ayuda a regular nuestras emociones.
  6. Nos permite entrenar habilidades cognitivas tanto si practicamos deportes individuales como grupales.
  7. Contrarresta la vida sedentaria, mejorando la calidad de nuestro descanso.
  8. Nos permite descubrir capacidades que no sabíamos que teníamos.
  9. Es un momento que, solos o en compañía de otros, nos permitimos tener para nuestro autocuidado y disfrute.
  10. Es una manera de estar conectados con nuestro cuerpo y nuestra mente.

Precauciones

 Asimismo, el especialista advierte de algunas precauciones a adoptar. “Los aspectos más técnicos en cuanto a lo deportivo tienen que indicarlos los profesionales de la actividad física. No obstante, por mi parte yo destacaría los siguientes”:

  • En primer lugar, ajustar las expectativas para que sean realistas y coherentes con el objetivo psicológico que se pretende conseguir. Por ejemplo, realizar algún tipo de deporte o ejercicio físico es bueno para nuestra salud psicológica pero ‘correr no va a hacer que des saltos de felicidad’. De la misma manera que hacer abdominales puede generar que mi cuerpo sea más bello según mis estándares, pero hacer abdominales cada día no hará que mágicamente mi autoestima suba de 0 a 10.
  • En segundo lugar, ir de menos a más, especialmente si venimos de una vida muy sedentaria o no estamos muy familiarizados con el efecto psicológico que la actividad física puede tener en nosotros. De este modo, vale más empezar poco a poco, asumiendo retos realistas para nuestras capacidades, para ir generando el hábito progresivamente y no quemarlo demasiado pronto, con el efecto de frustración que eso podría tener. O de confundirnos y pensar que la actividad física no es para nosotros cuando, en realidad, lo que hay que hacer es programarla mejor.
  • Una tercera recomendación, sobre todo si somos muy nuevos, tiene que ver con tener la mente abierta, ser pacientes e ir buscando la actividad física que sea más adecuada para nuestros gustos, necesidades y estilo de vida, lo cual a veces puede llevar un tiempo. Pero es una búsqueda que merece la pena y también prevendrá frustraciones evitables.

El ejercicio físico nos permite entrenar habilidades cognitivas tanto si practicamos deportes individuales como grupales. Imagen: Dobotdrean.

Consejos generales 

 Para finalizar, el psicólogo de ifeel aconseja:

-Incorporar el hábito de la actividad física de manera progresiva.

-Buscar la actividad física y el momento para realizarla que sean más adecuados a nuestros gustos, necesidades, objetivos y estilo de vida.

-Calibrar adecuadamente nuestros objetivos y expectativas. El deporte, bien practicado, es saludable, divertido, gratificante… pero los milagros no existen.

-Cuidado con las comparaciones. A veces vamos al gimnasio o seguimos en redes a personas con una actividad física y forma física muy superiores a las nuestras. Eso puede hacer que, en lugar de inspirarnos, nos llenemos de envidia o intentemos emularlos cuando todavía no estamos preparados. Mejor inspirarse un poco en ellos pero luego seguir nuestro propio camino. Aunque tardemos, podemos llegar muy lejos también con tiempo y buenas prácticas.

-Incorporar la actividad física como un elemento más dentro de un conjunto de actividades, hábitos o rutinas que protegen nuestra salud mental. Emplear el deporte como compensación a todo lo demás no es malo, pero es mejor que haya coherencia entre las distintas facetas de nuestra vida para que no sintamos la actividad física como una carga sino como un elemento coherente en nuestra vida.

Más información en ifeel


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