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Conseguir relajación con la ‘Postura Invertida del Cadáver’ de Yoga

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(17-7-2015). Rosa Mª Madrid profesora de Yoga en Ictiva nos explica cómo realizar esta postura de Yoga, la Advasana o ‘Postura Invertida del Cadáver’, que disminuye la presión cardiaca, el ritmo de la respiración, la tensión muscular y la ansiedad en general. También fortalece la columna vertebral y redistribuye la energía por todo el cuerpo.

Rosa Mª Madrid es instructora de Yoga en el gimnasio online Ictiva.

Rosa Mª Madrid es instructora de Yoga en el gimnasio online Ictiva.

Rosa Mª Madrid, profesora de Yoga en el gimnasio online Ictiva, explica que la Advasana o Postura Invertida del Cadáver (Shavasana) “es una postura de relajación del cuerpo y la mente”.

Esta postura de Yoga se puede usar “como postura de inicio de una sesión de yoga o bien entre posturas (normalmente de flexión hacia atrás) o como postura de relajación final”.

Realización

La profesora de Yoga recomienda seguir estos pasos para realizar la Postura Invertida del Cadáver: “túmbate boca abajo apoyando la frente sobre la esterilla. Puedes colocar una toalla doblada bajo la frente para estar más cómodo. Estira los brazos hacia delante. Piernas estiradas, junta las puntas de los pies y separa los talones. Céntrate en tu respiración y deja que tu cuerpo vaya soltando toda la tensión acumulada durante el día. No olvides relajar la expresión de la cara, frente y ojos”.

Beneficios

La postura de Yoga aporta, según Rosa Mª Madrid, “múltiples beneficios, ya que favorece la relajación, reduce la tensión física y emocional e induce a la mente a un estado de calma”.

Además también conseguiremos “disminuir la presión cardiaca, el ritmo de la respiración, la tensión muscular y la ansiedad en general. También fortalece la columna vertebral y redistribuye la energía por todo el cuerpo”.

Precauciones

La profesora aconseja precaución “con las embarazadas, que han de evitar esta Postura Invertida del Cadáver”.

Si la postura “no resulta cómoda se pueden colocar las dos manos juntas bajo la frente, o bien ladear la cabeza hacia un costado y después hacia el otro para no forzar el cuello”, explica Rosa Mª Madrid.


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