Después del parto, “es importante que la reciente mamá realice ejercicio físico guiado por un profesional, debido a que necesita recuperar su estabilidad articular, fortalecer los músculos del abdomen y del suelo pélvico”, recomienda  Mariela Villar Heidelberger, PhD y directora de Embarazo Activo®.

La práctica constante y gradual de actividad física la ayudará a lograr una mejor postura para el amamantamiento, añade. “Casi todas las mamás sueñan con recuperar su figura de manera inmediata después del parto. Pero después de dar a luz, hay que adaptarse a los cambios físicos y anímicos que se producen en toda mujer y acomodarse a las rutinas del bebé”.

Conviene comenzar cuando el médico personal le dé el alta y tenga la evaluación de su fisioterapeuta. Alrededor de los 40, 60 días del parto, según si ha sido vaginal o cesárea. Los días anteriores podrá hacer algunos ejercicios posturales y caminata muy suave.

Antes del ejercicio

Mariela Villar aclara que “se debe de tener una anamnesis inicial del estado físico de la mamá, historial deportivo previo al embarazo y si durante su embarazo realizó alguna actividad. Además, qué tipo de parto tuvo, si fue vía baja o cesárea o si fue intervenido. Sumado a los datos básicos del inicio de cualquier actividad en un centro deportivo”.

Para la práctica de ejercicios, se debe elegir indumentaria cómoda. Es imprescindible que no se sienta apretada y con poca movilidad, si está amamantando, tal vez se incline por utilizar protectores y apósitos para los pezones.

¿Cómo ir adaptando los ejercicios?

La especialista recomienda que “el ejercicio físico post parto debe realizarse con un comienzo leve y luego ir incrementando su ritmo y cargas externas. La mamá reciente estará cansada y tratando de descansar cuando el bebé duerme, como así también tratando de coordinar las tomas de pecho. Debe de estar dividido por etapas: inicial, intermedio y avanzado, según la mamá vaya cumpliendo objetivos, podrá ir avanzando en su plan de acondicionamiento”.

Antes de comenzar cada sesión, es recomendable que la mamá le dé el pecho al bebé, así está más liviana y el bebé se quedará tranquilo y satisfecho. Luego hay que esperar unos minutos, ya que puede haber una pequeña acumulación de ácido láctico y cambiar el gusto de la leche.

Se debe hacer mucho hincapié en la postura, ya que es de suma importancia en el período de lactancia, para que la mamá no discontinúe de darle el pecho por dolores posturales.

Precauciones

Conviene comenzar cuando el médico personal le dé el alta y tenga la evaluación de su fisioterapeuta. Alrededor de los 40, 60 días post parto, según si ha sido vaginal o cesárea. Como ya se ha recomendado, los días anteriores podrá hacer algunos ejercicios posturales y caminatas, prosigue Villar.

Es importante comenzar con el trabajo aeróbico a un ritmo suave para luego intensificarlo, en la medida de lo posible, y obtener finalmente los máximos beneficios para la salud. Será preciso que la mamá realice ejercicios que la ayuden a tonificar los músculos de los brazos, los hombros, las piernas, y los glúteos, con lo que logrará mejorar la figura y la postura, y también las tareas cotidianas se le harán más fáciles de sobrellevar.

Consejos finales

Mariela Villar anima a “recordar que el ejercicio físico en el post parto es nexo imprescindible entre la actividad que venía haciendo la mujer estando embarazadas y de la que hacía antes de quedar embarazada y desea retomar.

Además, debe de estar guiado por un profesional formado y certificado en el tema, concluye la experta.