(13-4-2012). El ejercicio en bicicletas elípticas es cada día más popular ya que la actividad que se desarrolla en ellas es de cardio de bajo impacto, protege las articulaciones y contribuye altamente a quemar grasas. Por todo ello, y gracias además a las evoluciones tecnológicas que han permitido el abaratamiento de costes, progresivamente está aumentando su implantación a nivel doméstico. Ambrós López, encargado de atención al cliente de bikestocks.com, explica qué hay que tener en cuenta para elegir una máquina elíptica.
¿Cuáles son los parámetros a considerar?
El peso del volante de inercia, que nos indica la calidad con que se desarrollará el ejercicio; el peso total de la máquina, que nos informa de la robustez, que no haya movimientos de desequilibrio; la amplitud de la geometría de la zancada, según el tipo de ejercicio que se quiera desarrollar; y la separación entre pedales, que afecta a la posición del usuario durante el ejercicio.
¿El peso del volante de inercia?
Con una máquina equipada con un volante de inercia de peso adecuado, el ejercicio se desarrolla de manera más lineal, pero si el peso no es suficiente se sienten vacíos al pedalear. Una máquina con un volante de 7 quilos ya ofrece una buena sensación, sin vacíos, pero a un nivel semi-profesional o de entrenamientos más intensivos el peso suele de ser a partir de los 14 kilos.
¿Por qué es importante el peso total?
Porque está en relación proporcional a la rigidez, la cual es muy importante ya que una máquina elíptica trabaja en desfase, en oscilación, y por ello es necesario que se trate de una máquina robusta que mantenga la oscilación sin desequilibrarse. Un peso adecuado en una máquina de gama media puede ser de unos 50 kilos.
¿La amplitud de la geometría de la zancada?
Si es muy plana, la zancada se asemeja más al nordic-walking; si es muy alta, sería similar a stepper; en una máquina de zancada media, el ejercicio que se desarrolla es como el de andar o de carrera. Por otra parte, también hay máquinas con amplitud de zancada configurable, que pueden ofrecer esos tres tipos de zancada en una sola máquina.
¿La separación entre pedales?
Es un factor que cada vez se tiene más en cuenta, porque no es lo mismo trabajar con los pies separados que con los pies juntos, y aunque puede ser una decisión según el gusto del usuario se considera que trabajar con los pies más juntos permite una posición de cadera más natural.
¿Algún otro factor?
Se puede considerar si es más conveniente una máquina programable o manual, o también autogenerada. Si es programable, la máquina ayudará a cambiar la resistencia durante el ejercicio de acuerdo con el perfil seleccionado; en una máquina manual habrá que cambiar el nivel de resistencia haciendo girar una rueda. En cuanto a las autogeneradas, no se enchufan a la corriente ya que el mismo movimiento del ejercicio genera la energía suficiente para que funcione, son más verdes y, además, todas las máquinas autogeneradas son programables.
¿Y los precios?
De 300 a 500 euros encontramos máquinas domésticas para entrenamientos esporádicos, de unas 3-4 horas semanales. De 500 a 700 euros, máquinas que van a aguantar un entrenamiento doméstico regular de unas 8-10 horas semanales. De 700 euros en adelante, máquinas semi-profesionales, para uso de más de una persona, preparadas para entrenamientos de hasta 20 horas a la semana.
Más información:
Web
ambros@bikestocks.es
No hay comentarios
Añade el tuyo