Climbing Pass promueve “el turismo de rocódromos”

“Cada rocódromo es completamente diferente; cada uno cuenta con sus presas, paneles, inclinaciones, diferentes servicios, nueva gente… es muy interesante para el escalador poder variar”, señala Álex Vega, socio fundador de Climbing Pass.

Esta plataforma online, que cuenta también con una app móvil gratuita, se propone incentivar la visita de los aficionados a distintas instalaciones, con lo que, a la vez, crea tráfico de usuarios en los rocódromos.

Bonos de puntos

Básicamente, Climbing Pass pone a disposición de los escaladores un bono de puntos, que se pueden canjear en diferentes rocódromos por pases de día, cada Rocódromo tiene un coste en puntos en función de su pase de día. La plataforma aglutina en la actualidad una oferta de 80 rocódromos repartidos por toda España.

“Hay más de 300 rocódromos en España, nosotros nos dirigimos a todos pero principalmente a instalaciones que ofrecen una experiencia integral y de calidad, incluyendo otros servicios de restauración y ocio al cliente”, explica Vega. Según añade, en nuestro país existe alrededor de un centenar de instalaciones que cumplan esos requisitos.

Vega expone que Climbing pass fomenta el movimiento de esa masa de escaladores con un sistema de entradas por puntos: el usuario de la plataforma adquiere un bono de puntos que canjea por entradas en los rocódromos asociados. Esos puntos tienen una validez de 2 años y se pueden compartir entre usuarios.

El bono de 200 puntos tiene un coste de 99 euros. Según subraya Vega, “el pase de Climbing Pass siempre costará solo un poquito más que un pase del bono de 10 del rocódromo”. Uno de los objetivos de Climbing Pass es beneficiar a aquellos escaladores que van a varios rocódromos sin nunca entrar en competencia con el propio rocódromo, que es el gran aliado de este proyecto.

Pura escalada indoor

Vega, quien cuenta con una dilatada experiencia como escalador de roca y en rocódromo, señala que la principal masa de escaladores ha pasado a ser de tipo indoor. De hecho, el experto apunta que “en torno al 75% de los nuevos aficionados a la escalada solo práctica en rocódromo; entre un 10% y 15% del total sale alguna vez a escalar en roca, en adición a su práctica indoor usual; y solamente en torno a un 10% o 12% se convierte en escalador habitual de “fin de semana” en roca.

Ante ese auge de la escalada indoor, Vega subraya la importancia de “dar a conocer a los nuevos escaladores todas las opciones existentes, pues mucha gente solo sabe de los 2 o 3 rocódromos más grandes o cercanos”. Según indica, Climbing Pass actúa también como un mapa interactivo, que permite filtrar por rocódromo, instalación, servicios, ubicación, extras…

El boom de rocódromos seguirá

Vega recuerda que España tradicionalmente se situaba unos 10 años por detrás de otros países europeos en cuanto a implantación de la escalada indoor. El experto añade que, tras el boom de creación de rocódromos en los últimos años, nuestro país se ha acercado muchísimo al nivel de otros países punteros como Francia, Alemania o Inglaterra.

“Vivimos en España tiempos de auge y, además, con instalaciones de calidad, con inversiones económicas millonarias y con grandes profesionales detrás”, destaca Vega. En su opinión, la escalada indoor va a seguir en aumento porque es más accesible a todo el mundo, evitando las dificultades que en ocasiones puede conllevar la escalada en roca.

Vega prevé que el sector seguirá creciendo en España. No obstante, el experto sostiene que “los rocódromos tienen que apostar por ser centros de entretenimiento más globales, con la escalada como eje principal, pero con una mayor diversificación de oferta de actividades ocio y restauración”. Vega concluye que, ante ese aumento de competencia, cada rocódromo “tendrá que buscar su personalidad, con sus elementos de diferenciación particular”.