Esportiva Aksa mantiene el tipo gracias a las ventas del outdoor técnico

Aún y así, los ingresos de Esportiva Aksa han caído alrededor de un 5% en el primer cuatrimestre respecto al mismo período del año anterior, según reconoce el gerente de la distribuidora catalana, Jordi Costa. El empreario advierte que hay que tener en cuenta que la temporada de invierno 2021-2022 fue excelente, mientras que esta última temporada 2022-2023 se ha visto perjudicada por la falta de frío y nieve.

Según los datos del registro mercantil, Esportiva Aksa facturó 2,7 millones de euros en el año 2021, un 46% más que el año anterior, gracias al auge de las actividades outdoor que se vivió durante la pandemia. Según declara Costa, el pasado 2022 los ingresos de la compañía quedaron por debajo de la facturación obtenida el ejercicio anterior, debido, principalmente, a la pérdida de la distribución de una sus marcas destacadas.

Fundada en 1976, Esportiva Aksa, distribuye productos de más de 20 marcas especializadas en deportes outdoor, entre las que encuentran las mochilas Alpina, la ropa de treking, AltaQuota, y la de alpinismo, Montane; el material técnico de escalada de Climbing Technology; los hornillos de Jetboil; los botiquines de LifeSystems; o los complementos de viaje de LifeVenture.

Sinner por Julbo

La distribuidora acaba de finalizar su campaña de sell in para la próxima temporada de otoño-invierno con mejores resultados que en la misma temporada anterior. Ese crecimiento, según Costa, se debe en gran parte a que a la pasada campaña acudieron con menos catálogo, al no haber podido todavía sustituir a Julbo.

El pasado año, la distribuidora catalana perdió la representación de Julbo después de que se produjera un cambio en la propiedad de la marca, que decidió optar por la venta directa. Para suplir esa merma, Aksa ha incorporado a Sinner, firma especializada también en gafas de sol, máscaras y cascos de esquí, que está “teniendo una buena acogida entre la distribución”, según el directivo.

Stock generoso

El gerente apunta que tanto los proveedores como las tiendas de outdoor han vivido los primeros meses de este 2023 con una situación de “stock generoso”, tras haber registrado una floja temporada de invierno tras realizar un gran acopio de producto.

Costa argumenta que, tras la escasez de material y los problemas de fabricación durante la pandemia, todo el sector quiso asegurar sus stocks para el año 2022 con pedidos abundantes. Sin embargo, la demanda del cliente final no se ha estado correspondiendo con las expectativas creadas.

No obstante, el ejecutivo asegura que la venta de productos de outdoor se mantiene a niveles aceptables en los primeros meses de este año. El directivo confía en que las tiendas van ir vaciando progresivamente sus almacenes y prevé una regularización del mercado en los próximos meses.

En cuanto a Esportiva Aksa, las previsiones de Costa son que el global de marcas que distribuyen tenga en este 2023 un sell in similar o superior al del pasado año. Asimismo, el empresario confía en una evolución positiva de la recién incorporada Sinner. En todo caso, el objetivo de la compañía es repetir los ingresos del pasado año, esto es, por debajo de la facturación récord de 2021.