Las vacunas son más efectivas en personas que hacen ejercicio

Las personas físicamente activas presentan un 50% más de probabilidades de desarrollar niveles más altos de anticuerpos después de recibir una vacuna, en comparación con las que son físicamente inactivas.

El hallazgo proviene de un estudio de la Glasgow Caledonian University, que sugiere que promover que las personas hagan ejercicio puede aumentar significativamente la efectividad de las campañas de vacunación .

El estudio también concluye que 30 minutos de actividad física 5 días a la semana disminuye el riesgo de enfermarse y morir de enfermedades infecciosas en un 37%.

Según el profesor Sebastien Chastin , uno de los autores del estudio, los hallazgos podrían tener importantes implicaciones para futuras respuestas a una pandemia como la que estamos viviendo actualmente por el virus Covid19.

En un artículo para el Foro Económico Mundial , Chastin dijo: “Ya sabemos que la actividad física es una de las formas más efectivas de prevenir enfermedades crónicas, junto con seguir una dieta saludable y no fumar. Un estudio anterior de 2008 ya encontró que la inactividad física es responsable de más de 5 millones de muertes prematuras cada año”.

“Ahora, nuestra revisión sistemática de la evidencia muestra que la actividad física regular fortalece el sistema inmunológico humano , reduce el riesgo de enfermarse y morir por enfermedades infecciosas en más de un tercio y aumenta significativamente la efectividad de las campañas de vacunación. Esto tiene importantes implicaciones para las respuestas a la pandemia”.

Respuesta inmunológica

Para el estudio, Chastin y su equipo reunieron y revisaron toda la evidencia disponible relacionada con el efecto de la actividad física en el riesgo de enfermarse y morir de enfermedades infecciosas como la neumonía, una causa frecuente de muerte por Covid19, en el funcionamiento del sistema inmunológico y sobre el resultado de la vacunación.

“Encontramos evidencia confiable de que la actividad física regular fortalece el sistema inmunológico humano”, señaló Chastin, especificando que favorecería sobre todo la creación de anticuerpos de tipo IGA, que recubren la mucosa de los pulmones entre otros órganos, así como la producción de células T CD4+, responsables de alertar al sistema inmunológico de un ataque y de regular la respuesta.

Asimismo, añade “en los ensayos controlados aleatorios que estudiamos, las vacunas parecen más eficaces si se administran después de un programa de actividad física. Una persona activa tiene un 50% más de probabilidades de tener un recuento de anticuerpos más alto después de la vacuna que alguien que no activo”.

Más información sobre la investigación completa, aquí