Shooter Padel entra en el mercado del pickleball y amplía su fábrica

La start-up Shooter Pádel está en plena expansión. La empresa ha ampliado su fábrica ubicada en Olius (Solsona) hasta ocupar 1.000 metros cuadrados y, así, mejorar su servicio. Estas instalaciones “disponen de un laboratorio, las oficinas de la marca y una sala de exposiciones”, según explica el directivo David Vilaseca. 

Además, también tienen una pista de pádel dentro del recinto, “dónde hay varios técnicos que se dedican a aconsejar a los clientes para saber qué pala sería más adecuada para ellos”.

PERSONALIZACIÓN AL DETALLE

La compañía dispone de un sistema de pintura e impresión que, a partir de tecnologías avanzadas, permite personalizar las palas para cada comprador. “Los clientes nos piden un peso concreto para la pala o un puño más o menos delgado, entre otros muchos detalles, y las personalizamos al 100%”, explica Vilaseca.

La empresa ha ampliado su gama de productos con la entrada a un nuevo mercado en auge: el pickleball. Es un paso importante que le permitirá crecer, sobre todo, en Estados Unidos, “donde este deporte es el más practicado de los que se juegan con raqueta”. Allí hay ocho millones de personas que juegan habitualmente a este deporte. 

6 MODELOS DIFERENTES DE PALAS DE PICKLEBALL

Los prototipos de las palas de pickleball, según el director comercial, se empezaron hace siete meses y la colección se espera que vea la luz en quince días, con seis modelos diferentes.

“En España no está tan claro el futuro de este deporte”, sostiene Vilaseca, aunque destaca que “las pistas dónde se juega son mucho más baratas que las de pádel”. “Una pista de padel cuesta entre 15.000 y 30.000 euros, mientras que la inversión que requiere la instalación de una pista de pickleball no llega a los 1.000 euros”. 

30.000 UNIDADES EN 2025

La empresa espera alcanzar una producción de 12.000 unidades en 2024 de palas de pàdel y 5.000 de pickleball, año en que cumplirá su décimo aniversario. Asimismo, prevé crecer hasta las 26.000 unidades (sumando las de pádel y las de pickleball) en 2025. Además, calcula un crecimiento de la facturación del 60% para el cierre de este 2023, aunque no revela cifras concretas. 

Actualmente, Shooter Padel opera a través de tiendas físicas en unos 10 países (Emiratos Árabes, Italia, Francia, Inglaterra, Bélgica, Dinamarca, Noruega, Suecia, Finlandia e Islandia). Mediante su página web vende en todo el mundo. Del conjunto de su facturación de la gama Shooter Padel, el 50% pertenece al mercado nacional y el 50% al internacional.

CAMBIO DE TENDENCIA

Preguntado sobre si la empresa está afectada por el sobrestock que existe en el mercado de palas de padel generado a raíz del boom de la actividad durante la pandemia, David Vilaseca ha señalado que “no existe ninguna afectación para nosotros porque la fabricación que se hace es la que realmente llega a venderse, al contrario de otras marcas”. El directivo añade que el pádel está creciendo notablemente alrededor del mundo, sobre todo en países como Italia o Francia, mientras que en España “se encuentra en un mercado maduro”.

Un cambio de tendencia que ha percibido Vilaseca en los dos últimos años es que “las pequeñas marcas europeas han pasado a comprar las palas en empresas de Europa, en vez de asiáticas, para aminorar los tiempos de entrega de los productos”, entre otros aspectos.