Jordi Maré gana la intercat Race 2021

Fin de semana extremadamente anticiclónico con motivo de la Intercat Race Vila de Torredembarra 2021, el trofeo ‘pata negra’ del Club Maritim Torredembarra, entidad que tradicionalmente lo vincula a su regata de mayor nivel de su calendario anual. En la primera, que se celebró en 2012, coincidió con la Copa de Europa, mientras que en la última edición realizada, ésta coincidió con el Campeonato de Cataluña de patín a vela senior de 2019. Si en 2012 el vencedor de la Intercat Race Vila de Torredembarra fue Jaume Llobet, del Club de Mar Sitges que, asimismo, se proclamó campeón de la Copa de Europa, en 2019, el ganador fue Josep María Robert, del Club Nautic Sitges, que, a su vez, se proclamó campeón de Cataluña de primera categoría.

REGATA DE NIVEL 2

En esta ocasión, la Intercat Race Vila de Torredembarra 2021 ha sido una regata de Nivel 2, es decir, clasificable para el acceso de patinistas catalanes de primera categoría al Campeonato de España de este 2021.

Después de que el pasado 2020 no se pudiera celebrar a causa de las restricciones derivadas de la pandemia del COVID-19, la convocatoria de este 2021 tuvo lugar el pasado fin de semana, con la inscripción de 29 patines a vela senior, así como con una presencia de unas 8 tripulaciones de otras embarcaciones de tipo catamarán. La flota más numerosa fue la del Club Maritim Altafulla, con 18 regatistas.

ANTICICLÓN

El anticiclón estuvo presente ya de forma relevante el sábado con un garbi de unos 5-6 nudos y una mar muy plana pero, asimismo, con una corriente de garbi cuya intensidad de unos 3-4 nudos ya se evidenció con contundencia en la línea de salida.

Tras darse el pistoletazo de inicio con toda la flota saliendo amurada a estribor, prácticamente toda su globalidad optó por tomar el bordo de mar adentro.

EL CONSEJO DE MONTAGUT

Solo tres patrones, Rafael Oliva, Jordi Maré y un tercer patinista optaron por virar y marcharse por el bordo de tierra para atenuar los efectos de la intensa corriente adversa, así como para aprovechar “los efectos favorables que en Torredembarra aporta la bordada próxima a tierra y que conviene prolongar hasta prácticamente la escollera del puerto local”, según había explicado en tierra el reconocido alma mater del patín a vela de Altafulla, Ramon Felipe de Montagut, a este cronista.

Sin embargo y según reconocería el propio Montagut en tierra, tras la prueba, “la regata de hoy evidencia que una cosa es lo que se dice y la otra lo que se hace”. En ese sentido, el patrón del ‘Chiripa’ argumentaría que “el uno por el otro y con lo compacta que avanzaba la flota, así como la confianza de hallar más viento arriba” propiciaron que buena parte de aquella parte de sus integrantes apostara más de media ceñida por aquella bordada de mar adentro.

CRUCE REVELADOR

Cuando llegó el momento del cruce, quedó claro que los que habían apostado por el bordo de tierra ya iban en cabeza muy destacados.

En la subida hacia la boya, sin embargo, los que venían de tierra constataron como su trayectoria estaba muy marcada por la deriva provocada por la corriente. Cuando aún faltaban unos 200 metros para llegar a la boya, Maré decidió virar hacia garbi convencido de que no pasaría boya, pese a ir a barlovento de Oliva. Por su parte, Rafael Oliva decidió seguir mar adentro. Aquel apoyo hacia la derecha del triángulo le valió a Maré para pasar primero la boya de la primera ceñida sin necesidad de repicon y con gran ventaja sobre sus rivales.

‘FESTIVAL’ EN EL PASE DE BOYA

A su popa, Maré dejó un pase de boya 1 ‘dramático’ en el que la la corriente hizo con los participantes lo que quiso forzándoles a múltiples repicones para superar la boya que solo los que apostaron por llegar a ella con gran barlovento lograron superar.

Por detrás de Maré, marcharon Pepe Sánchez Runde Gavaldà y Jesús Selma en segunda y tercera posición respectivamente, mientras que Víctor Oliva, hijo de Rafael Oliva, se situó cuarto.

MENOS VIENTO 

Al iniciar la segunda ceñida, el viento bajó levemente situándose en unos 5 nudos. Maré volvió a tomar el bordo por tierra. Sus seguidores le replicaron, con excepción de Jesús Selma que decidió virar para probar si mar adentro había más presión. Posteriormente solo le imitarían unos pocos barcos que viraron la boya 3 bastante después que él. Selma, de todos modos, viraría de nuevo hacia el bordo de tierra cuando llevaba un tercio de ceñida.

Por su parte, Maré apoyó el bordo de tierra todavía mas que en la primera ceñida, rebasando con creces la layline de la boya 1 con la confianza de que ello le evitara tener que hacer repicones. Tras él, Pepe Sánchez Runde Gavaldà todavía apoyó algo más el bordo de tierra.

A medida que ambos subían hacia la boya 1, fue constatándose que el viento iba perdiendo intensidad y que, la fuerza de la corriente de garbi les iba robando el barlovento sobre la boya que habían atesorado inicialmente. Asimismo, los barcos que iban a su popa subían con una proa envidiable.

“BORDO TRAICIONERO”

Maré recordó las explicaciones que le había dado Ramón Felipe de Montagut en tierra antes de la prueba: “con garbi, el bordo de mar puede ser traicionero. Aunque lleves ventaja, los que vienen de tierra salen favorecidos por el reflujo que genera la escollera y no es raro que sean ellos los que acaban imponiéndose”.

Maré tenía el dilema de si mantener el bordo mar adentro acercándose a boya o virar para ir a marcar a los que subían desde tierra con más barlovento y una proa mas orzada.

El patrón del ‘Comeback’, no obstante constató que el viento era muy zonal. A su proa se veía algo de viento, mientras que a su popa el mar parecía una balsa. Decidió jugársela tirando mar adentro con la confianza de que a sus seguidores bien podía sucederles lo mismo que a él. En su subida tendrían que pasar por la zona sin apenas viento que él se había encontrado.

SORPRESAS FINALES

Maré subió más arriba de la layline de la boya 1. Pensó que, una vez se apurase a babor le convenía ir a buscar la boya con la mayor velocidad posible para contrarrestar la potente corriente. Y entonces vio que el Comité acababa de montar la línea de llegada. En aquel momento, se llevaban ya 70 minutos de prueba y el tiempo límite se había fijado en 100 minutos. Si el recorrido no se hubiera acortado, probablemente no habría sido posible concluir la manga por finalización del tiempo límite.

Jordi Maré viró y se amuró a babor. Adquirió velocidad y vio como los rivales que le habían inquietado habían dejado de hacer aquella proa envidiable y que, asimismo, progresivamente iban perdiendo velocidad.

El regatista del Club Nautic Sitges cruzó primero la línea de llegada amurado a babor.

Pepe Sánchez Runde Gavaldà, sin embargo, no tendría tanta suerte. Él no apoyó tanto la subida hasta más arriba de la boya y se conformó con alcanzar la layline. Cuando se dirigía amurado a babor hacia la línea de llegada, empezaron a ‘surgirle contrincantes’ procedentes del bordo de tierra. La escasedad del viento y la potencia de la corriente, junto con el cumplimiento de los derechos de paso, provocaron una serie de ‘sorpresas’ en los últimos setenta metros de la manga.

Al final, Víctor Oliva, que había concluido la vuelta al triángulo cuarto, logró entrar segundo, nueve minutos después que Jordi Maré. Tercero entraría Carlos Jiménez, mientras que el valenciano, Vicente Pastor, sería cuarto. Pepe Sánchez Runde Gavaldà acabaría entrando quinto.

ANULACIÓN POR FALTA DE VIENTO

Al día siguiente, domingo, el anticiclón reinó con todo su esplendor eclipsando completamente al viento y provocando que el comité anulara, a las 15 horas, la prueba prevista para aquel día.

En la entrega de premios, el acto contó con la presencia del alcalde de Torredembarra, Eduard Rovira; el concejal de deportes de la localidad, Raul García; el delegado territorial de Tarragona de la Federación Catalana de Vela, Javier Garrido; el presidente del club Maritim Torredembarra, Joan Manuel Mercadé; y el representante de la directiva de la Adipav, Pepe Aznar.

CLASIFICACION FINAL de la Intercat Race Vila de Torredembarra 2021 de patín a vela sénior.