5 usos del móvil como defensa para las corredoras

Lamentablemente, las mujeres no pueden salir a correr con total libertad en nuestro país y a cualquier hora. En algunas ocasiones, son centro de vejaciones, malos comentarios y faltas de respeto por parte de algunos hombres, que, en el peor de los casos, pueden derivar en situaciones de acoso y de violencia.

Ante estas situaciones, el teléfono móvil puede ser una herramienta de autodefensa muy poderosa. Por lo tanto, aviso a todas las corredoras: no salgáis de casa sin este artilugio en el bolsillo o en el brazo (aprovechando que muchas marcas tienen en el mercado cintas que nos permiten correr con él colgado del brazo). Eso sí, otro consejo antes de entrar a comentar 5 formas en las que el celular puede sernos útil como herramienta de defensa. Es necesario que el teléfono cuente con la batería cargada de forma total, para evitar cualquier sorpresa de última hora que nos impida usarlo cuando sea preciso. Y es que, por ejemplo, podemos usarlo para tomar una foto o un vídeo de un acosador que nos persiga, para ser usada como prueba definitoria ante la policía y ante un juez.

Rastrearnos a nosotros mismos. Muchas aplicaciones que existen en el mercado permiten monitorizar nuestra ubicación mientras estamos corriendo. En otras palabras, familiares y amigos pueden conocer en cada momento dónde nos encontramos. En este sentido, dentro del mercado norteamericano, las aplicaciones AllTrails LifeLine y RoadID son las que cuentas con más adeptas. De hecho, estas aplicaciones llegan a advertir a nuestros seguidores si dejamos de movernos en algún momento o bien si nos desviamos de la ruta preestablecida.

La aplicación, en este sentido, nos envía una serie de alertas con las que podemos entrar en contacto con nuestros familiares y amigos para evitar cualquier malentendido. Podemos enviar un mensaje de texto a un amigo –o a nuestra pareja o a quién nosotros señalemos- para informarle que nos calzamos las zapatillas para salir a entrenar. De esta forma, se envía un pin con nuestra ubicación actual. Por lo tanto, antes de salir de casa es preciso avisar. Como dice el refrán popular, más vale prevenir que curar.

Realizar una llamada. Si estamos atravesando una zona sin caminantes o bien que nos da un poco de miedo, podemos usar el celular para efectuar una llamada. Se trata de una medida disuasoria que, lamentablemente, se ven obligadas a usar muchas mujeres y chicas cuando vuelven a su casa de noche, tras haber salido de fiesta. En este caso, cuando corremos por zonas oscuras y poco transitadas, también puede ser una buena herramienta. La recomendación general es que si notas que alguien te está siguiendo, o tienes la leve sensación de ello, uses el teléfono para advertirle que no estás sola.

En esta llamada, además de advertir al posible agresor, debes decir dónde te encuentras y hacia dónde te diriges. Hazlo con una conversación continua, ya que será el mejor aviso para el posible acosador a la hora de advertirle de que no estás sola y de que puedes obtener ayuda de forma rápida, fácil y efectiva. En este sentido, hay que tener en cuenta que todo lo que pueda romper los planes de un posible agresor es beneficioso para cualquier mujer.

Marcar el 016. El Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad, por medio de la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género, presta el Servicio telefónico de información y de asesoramiento jurídico en materia de violencia de género, a través del número telefónico de marcación abreviada 016. Se trata del número de atención a víctimas de malos tratos. Por lo tanto, debemos tener claro cuándo debemos y cuando no llamar este número.

El 016 aporta atención telefónica y online las 24 horas del día y los 365 días del año. Además, deriva las llamadas de emergencia al 112. La atención telefónica cubre hasta 52 idiomas distintos de forma directa. Algunas mujeres sienten aprensión a llamar a este número, considerando que lo que les está ocurriendo no es tan grave. Desde los expertos policiales y de lucha contra la violencia de género, aconsejan que si el instinto de una mujer las alerta de una sospecha o problema, que hagan caso a su instinto. Llamar a este número tendrá dos consecuencias directas: generar una respuesta policial y registrar nuestra ubicación.

Enviar un SOS. Nuestro teléfono móvil nos permite enviar un SOS de emergencia. Por ejemplo, en un Iphone 8 o posterior, para enviar un SOS debemos presionar, de forma simultánea, y mantener pulsados el botón lateral derecho y uno de los botones de volumen. Después de una cuenta atrás, el teléfono llamará automáticamente a las autoridades locales y, al mismo tiempo, enviará un mensaje de texto a sus contactos de emergencia en nuestra ubicación actual (de hecho, se actualizará cada vez que cambie su ubicación). En el caso de tener un Iphone 7 o anterior, deberíamos presionar rápidamente el botón superior o el lateral 5 veces.

Para un dispositivo Android, estas características intrínsecas de seguridad varían. Por ejemplo, en un teléfono Samsung, hay que mantener presionado el botón de encendido para ver las opciones del menú. Selecciones la opción de Modo de emergencia, que nos permitirá conservar la batería de nuestro teléfono y podremos enviar nuestra ubicación a nuestros contactos. Por cierto, la primera vez que lleguemos a este punto deberemos aceptar los términos y condiciones de uso.

Arma arrojadiza. Está claro que ésta es la opción menos plausible de este decálogo de 5 puntos –al que también podemos llamar pentálogo- es ésta. Si un desconocido te está atacando, el móvil puede ayudar a defenderte. Puede ser un arma arrojadiza, como si de una piedra se tratara. No es la opción por lo que deberíamos optar, a no ser que sea la última. Y es que el móvil puede no ser un arma ideal, pero, en un momento de necesidad extrema, se trata de un instrumento contundente que puede llegar a golpear a un atacante con suficiente fuerza. De hecho, en foros de cómo debe actuar una mujer en una situación de este tipo, fuentes policiales afirman que cualquier objeto que tengas en la mano para defenderte es mejor que ninguno.