(1-9-2020). La pandemia ha provocado un notable incremento en el número de practicantes de running, especialmente, en los meses de mayo y junio, pero a su vez ha condicionado el componente social de su práctica. Según señalan desde Club de Corredores, “se ha tendido al individualismo”.
El director deportivo de Club de Corredores, Jorge Benito, considera “lógica” la tendencia hacia el individualismo en el running por el riesgo de contagio y asegura que los grupos de entrenamiento “se han reducido hasta en un 50% respecto a una temporada normal”. Benito detecta una mayor parte de práctica individual, en pareja o, como mucho, en grupos de 4 o 5 personas.
Desde Club de Corredores, con sede en Madrid y con alrededor de 800 socios, confirman que los meses de mayo y junio “fueron una auténtica romería de personas corriendo por la calle”. A partir de julio, el número de practicantes se ha ido reduciendo hasta llegar a las cifras habituales de otros años, básicamente, “por las altas temperaturas y el riesgo de rebrote”.
Sin competiciones o actividades sociales a muchos corredores les cuesta entrenar
Sin embargo, Jorge Benito prevé que la práctica se vuelva a activar en septiembre y octubre, lo que favorecería la venta de las tiendas y la asistencia a los entrenos y actividades del club. “Nosotros nos dirigimos a un corredor popular de nivel medio y bajo, que ante los riesgos para practicar deportes en espacios cerrados, es probable que se siga decantando por el running o el ciclismo”, sostiene el director deportivo.
Un 20% menos de socios
La ausencia de carreras ha impactado negativamente en el número de socios de Club de Corredores, que antes de la pandemia se situaba en los 1.150 y ahora ha perdido un 20% del total, situándose “entre los 750 y 800”. “Sin competiciones o actividades sociales a muchos les cuesta entrenar y eso conlleva que no se apunten o renueven con los clubes para esta temporada”, explica Benito.
Con todo, el director deportivo manifiesta que la viabilidad económica del club está asegurada y que el único cambio que se producirá es que “seguramente no podremos contratar al mismo número de monitores que en la temporada anterior”. En función del ingreso derivado de las cuotas, se determinará un volumen de entrenadores, que será flexible a lo largo del año.
Por otro lado, el club ha notado una avalancha de correos electrónicos de nuevos corredores que necesitan asesoramiento en cuestiones de calzado, textil y entrenamiento personalizado. Las compras de los no socios se han incrementado y, de esta manera, se espera paliar parte de las cuotas perdidas.
Incremento de lesiones
Benito también percibe un incremento de la demanda de los servicios de fisioterapia “porque se han producido más lesiones entre los nuevos practicantes”. “Muchos de los que empiezan no adaptan bien el cuerpo a la actividad o no brindan al cuerpo el descanso necesario”, prosigue el director deportivo, quién, eso sí, puntualiza que esta es una problemática que ya existía anteriormente con el calendario normalizado de carreras.
Jorge Benito ve muy complicado que el calendario de grandes carreras populares se pueda recuperar antes de 2021 y, de hecho, “ya veremos si durante el año que viene se realizan este tipo de competiciones, es una previsión optimista”. Según sostiene, ningún organizador, patrocinador o ayuntamiento se quiere arriesgar a “ser noticia porque se han producido una serie de contagios en la carrera de la que es responsable”.
El director deportivo de Club de Corredores sí que ve factible que se puedan celebrar carreras con un volumen de participantes reducido, de unos centenares como mucho, en base a unos protocolos de seguridad sanitaria estrictos.
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